Armengol permite que filósofos o músicos den clases de náutica y hace peligrar la validez de los títulos
Incumple la legislación que obliga a los profesores a tener el título de marino mercante
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El Govern balear liderado por la presidenta socialista en funciones, Francina Armengol, pone en riesgo y deja en el aire la validez de las titulaciones náuticas profesionales en las Islas, otorgadas por el Centro Integral de Formación Profesional Nauticopesquera de Palma, al permitir que filósofos, músicos o personas con otras especialidades den clases de náutica.
Todo ello después de que la Conselleria de Educación, en el concurso de méritos para cubrir siete plazas de este centro docente, haya ignorado un real decreto de abril de 2022, que fija como obligatorio «poseer un título profesional de la marina mercante» para impartir y evaluar las competencias de los alumnos.
Según ha denunciado por escrito un grupo de docentes, de culminar el proceso de estabilización sin este requerimiento, las titulaciones oficiales impartidas en este centro de formación no tendrían «reconocimiento internacional ni por parte de la Marina Mercante».
Los principales títulos náuticos y certificados profesionales que ofrece actualmente Baleares quedarían, por tanto, en papel mojado, si la Conselleria de Educación no reconsidera su postura y sigue sin excluir del proceso de adjudicación de plazas a las personas que no hayan acreditado el título profesional de la Marina Mercante.
Las plazas ofertadas por el Govern están abiertas, en general, a personas «con el título de doctor, licenciado, ingeniero o arquitecto o el título de grado correspondiente o titulación equivalente a efectos de docencia».
No tiene en cuenta, por tanto, que desde hace poco más de un año la legislación española reitera la exigencia de que los formadores, supervisores y evaluadores dispongan del «título profesional de la Marina Mercante o el título académico universitario exigido para obtener dichos títulos profesionales, además de una formación o experiencia profesional adicional y acreditada relativas a la formación a impartir».
En la misiva remitida a Educación, a la dirección general de la Marina Mercante y Capitanía Marítima de Mallorca, los profesores afectados por el proceso de estabilización de plazas advierten de que, además de los títulos, «no serían homologables los diferentes certificados de especialidad y de suficiencia que expide el centro y que son exigidos para trabajar a bordo de buque, en general, y en determinados tipos específicos de embarcaciones, imposibilitando el desarrollo de la profesión».
La conocida como la Nauticopesquera está ubicada en el Dique del Oeste de Palma y desde hace más de dos siglos es un referente histórico en materia de formación en la navegación profesional en Baleares.
De culminarse así el proceso de consolidación de plazas, varios profesores en activo con contratos temporales perderían su trabajo y serían sustituidos por otros que no están legalmente facultados para dar clases de Navegación en Instalaciones Marinas.
Según censuraron hoy en rueda de prensa los docentes Javier Carbajosa y José Gil, «si hay una ley que obliga a que los docentes sean profesionales de la Marina Mercante, no entendemos cómo se pueden abrir las plazas de estabilización a profesionales con otras titulaciones, como filósofos o músicos. No tiene sentido que imparta clase gente que nada tiene que ver con la náutica», lamentó Carbajosa.
Por ello, advirtieron de que 1.000 personas anuales cursan estos estudios y se podrán quedar fuera de la homologación de la titulación. «Una comunidad como Baleares, con la tradición y fuerza náutica que tiene, no merece tal desprecio», zanjaron.