PSOE de Andalucía

La misma Montero que formó parte de la Junta de los ERE ya comanda al PSOE andaluz: «Nueva etapa»

María Jesús Montero se ha proclamado este sábado nueva secretaria general del PSOE de Andalucía (PSOE-A)

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María Jesús Montero, secretaria general del PSOE de Andalucía (PSOE-A).
Borja Jiménez

María Jesús Montero ya es la nueva secretaria general del PSOE de Andalucía (PSOE-A). Tras quedar como única candidata, este sábado la también ministra de Hacienda y vicepresidenta del Gobierno se ha proclamado líder de los socialistas andaluces, ante los que ha dicho que empieza una «nueva etapa» en el partido, pese a que formó parte de los gobiernos andaluces de Manuel Chaves y José Antonio Griñán, es decir, de las Juntas socialistas del Caso ERE, del Caso Isofotón, del Caso Faffe, del Caso Invercaria… y centenares de tramas más de las que aún quedan 130 por resolver en los juzgados de Sevilla.

Así, María Jesús Montero ha celebrado liderar al PSOE-A vendiéndose a sí misma como una novedad. La evidencia, sin embargo, es que se trata de la última bala de Sánchez para recuperar una Andalucía perdida, precisamente, por la corrupción que protagonizaron los gobiernos andaluces de los que formó parte la propia Montero.

Sea como fuere, Sánchez ha conseguido, sin mucho esfuerzo, volver a colocar a una sanchista al frente de la federación socialista andaluza, repitiendo así la estrategia llevada a cabo con Juan Espadas y que resultó un fiasco total, entre otras cosas, porque son muchos los militantes del PSOE-A que llevan años reclamando una federación socialista andaluza -la mayor que tiene el PSOE- más independiente de Ferraz y, sobre todo, de los designios de Pedro Sánchez.

La Comisión Regional de Ética del PSOE-A ha proclamado este sábado, 18 de enero, como secretaria general a María Jesús Montero tras verificar que su candidatura «cumple con todos los requisitos que establecen los estatutos federales del partido», incluida la presentación de avales en la cifra exigida de un mínimo del 12% (4.947) y un máximo del 15% (6.183) de los apoyos de la militancia.

Montero vende una «nueva etapa»

La recién proclamada nueva secretaria general del PSOE de Andalucía, María Jesús Montero, ha valorado como «un orgullo» y «un honor» esta nueva responsabilidad que ha adquirido al frente de la federación socialista andaluza, con la que perseguirá el «objetivo» de «recuperar la confianza de los andaluces». Una confianza perdida, precisamente, por la corrupción protagonizada por los gobiernos socialistas andaluces de los que la propia Montero formó parte como consejera de Salud y de Hacienda, entre otros cargos.

La también vicepresidenta primera del Gobierno de España ha colgado un vídeo en redes sociales en el que ha señalado que el «único objetivo común» del partido ahora será el de «recuperar la confianza de los andaluces», de «ser capaces de tener un proyecto político valiente, de izquierdas, ilusionante, que permita que todos los sectores se sumen a esta apuesta por Andalucía».

«Tenemos ambición en Andalucía, tenemos talento, capacidad de transformar las cosas, y queremos hacerlo», ha proclamado la dirigente socialista andaluza, que ha asegurado que en el PSOE-A ahora «todos y todas estamos incorporados», desde la premisa de que «Andalucía necesita un Partido Socialista unido, fuerte, capaz de articular ideas y de recuperar el proyecto de ilusión, de autogobierno, de esperanza que los andaluces necesitamos para progresar».

Montero augura que «entre todos vamos a ganar Andalucía, porque Andalucía necesita un proyecto que efectivamente se preocupe, se ocupe de los ciudadanos, de la vivienda, de la sanidad, de la educación pública, de la cultura, de la industrialización de nuestra tierra, para que nunca más ningún joven tenga que abandonar nuestras provincias para marcharse a buscar oportunidades de vida en otras partes de España».

Además, la ex consejera andaluza de Salud y de Hacienda ha defendido igualmente que «nuestros mayores necesitan una Andalucía que avance, que progrese, que se ocupe de ellos, que se ocupe de la dependencia y también de la calidad de vida en estos años tan importantes que tenemos después de haber abandonado la que llamamos vida activa».

La nueva secretaria general del PSOE-A ha concluido su vídeo apuntando el inicio de una «nueva etapa» con «ánimo, orgullo, energía, con la cabeza bien alta y, sobre todo, con esperanza y con ilusión». «Te necesitamos y Andalucía nos necesita», ha terminado María Jesús Montero.

Juan Espadas, el juguete roto de Sánchez

El secretario general saliente del PSOE-A, Juan Espadas, ha trasladado públicamente su enhorabuena a Montero, al tiempo que ha abogado por que «todos los socialistas andaluces» estén «unidos y trabajando» junto a ella con el «único objetivo» de que la también ministra de Hacienda sea «la próxima presidenta de la Junta de Andalucía».

Así lo ha señalado a través de sus redes sociales un Juan Espadas que ha querido aparentar normalidad pese a que hace apenas unos días aseguraba que su ilusión era la de seguir liderando al PSOE-A. La ilusión de Sánchez, sin embargo, no era la misma; motivo por el que desde Ferraz conminaron al ya ex líder de los socialistas andaluces a retirarse por la carrera de unas primarias en las que Montero sería la candidata oficialista. Espadas, sumiso como siempre, acató y anunció su adiós por la puerta de atrás.

Asó, Espadas anunció el pasado 7 de enero que no optaría a la reelección como secretario general del PSOE-A, al contrario de lo que había venido expresando con anterioridad, al entender que debía dejar paso y unir fuerzas a favor de una candidatura «ganadora» para el partido como es la que, dijo, encabeza María Jesús Montero. Un buen papel, pero poco creíble, en las que fueron las últimas palabras en público de un Juan Espadas cuyo carisma y popularidad ha brillado por su ausencia. Su mayor anécdota como líder del PSOE-A, de hecho, ni siquiera la protagoniza él. Lo hizo su mujer, la investigada Carmen Ibanco, y su ya famoso «worperfe».

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