Cádiz

Detenidos dos hermanos de un clan de narcos por el intento de asalto al cuartel de Barbate

Marlaska reduce lo ocurrido a un "incidente callejero"

cuartel Barbate
Cuartel de la Guardia Civil en Barbate.

La Guardia Civil ha detenido a dos personas, un hombre y una mujer, como presuntos responsables de los altercados que en la tarde de este martes se registraron a las puertas del cuartel de Barbate (Cádiz), localidad en la que fueron asesinados dos guardias civiles el pasado 9 de febrero. Ambos arrestados son hermanos, tal y como han confirmado fuentes de la Benemérita, que no descartan nuevas detenciones por estos hechos.

Una veintena de personas de un clan familiar de la zona con antecedentes por tráfico de drogas se desplazó este martes al cuartel de Barbate profiriendo amenazas e increpando a los guardias civiles que allí se encontraban. La Benemérita está instruyendo las diligencias oportunas a este respecto para esclarecer los hechos y determinar la responsabilidad de los actuales detenidos y de los que puedan producirse en el futuro.

El incidente ocurrió poco después de que una patrulla parara un coche que circulaba a gran velocidad con cuatro hombres en su interior. Tras darle alcance, ordenaron a sus ocupantes que abandonaran el vehículo, pero uno de ellos se introdujo en él de nuevo, dando un acelerón con el que a punto estuvo de arrollar a uno de los guardias civiles. Los agentes les recriminaron el intento de atropello y los cuatro sujetos comenzaron a increparles.

Una hora después, unas 20 personas, entre ellas dos de los ocupantes del vehículo, se personaron en el cuartel de Barbate para insultar a los guardias civiles allí presentes. El sindicato AUGC de Cádiz denunció en sus redes sociales algunas de las amenazadas vertidas contra los agentes: «Os tenía que pasar como a los del puerto. ¡Os tenemos que matar! ¡Tenemos armas!». La asociación añadió que el cuartel tenía las puertas cerradas y eso impidió el asalto. «Es intolerable esta pérdida total del principio de autoridad», denuncian.

Además, fuentes del Instituto Armado han indicado que la veintena de individuos pertenecen casi todos a una misma familia conocida de la zona que acumulan varios delitos de tráfico de drogas, lesiones, amenazas, contra la seguridad vial y contra el patrimonio, entre otros.

Tras lo ocurrido, el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha optado por quitar hierro al asunto: «Se trata exclusivamente de un incidente callejero, como desgraciadamente ocurre en muchos pueblos y ciudades de nuestro país», ha apuntado tras inaugurar una exposición sobre el 11-M, desvinculando este intento de asalto al cuartel con el doble asesinato a manos del narco en el puerto de Barbate.

Lo último en España

Últimas noticias