Twitter: La mujer que se casó con un árbol celebra su primer aniversario de boda
Kate Cunningham decidió casarse con un árbol hace un año. La boda rompió con todos los esquemas de su familia


La dendrofilia es el amor por los árboles, una conducta extraña que puede dar lugar a situaciones inesperadas. Kate Cunningham decidió casarse con un árbol hace un año. La boda rompió con todos los esquemas de su familia, pensando que algún día se casaría con una persona o viviría en pareja. Kate hizo realidad su sueño por una buena causa, salvar a esos árboles que tantos instantes de alegría y de paz le habían dado. Un año después cree firmemente que fue la mejor decisión que ha tomado en su vida.
La mejor decisión que ha tomado en su vida, casarse con un árbol
Geçtiğimiz yıl bir ağaçla evlenen 38 yaşındaki Kate Cunningham 1'inci evlilik yıl dönümünü kutlamış. Ağaçla evlenmenin öz güvenini artırdığını söyleyen Kate, "kendimi öncesine göre daha güçlü ve daha iyi biri olarak görüyorum" demiş. Nice mutlu yıllara o halde. pic.twitter.com/dDSSDkAE72
— biacaip (@biacaipcom) September 14, 2020
Hace un año Kate Cunningham se casó con un árbol. Lo hizo para salvar su querido Rimrose Valley Country Park, el lugar estaba amenazada ante la construcción de una carretera próxima. El árbol con el que se casó fue indultado y el bosque salvado, por ese motivo se siente especialmente orgullosa de su decisión.
Este tipo de amor pasional por los árboles es algo que puede llevar a problemas mentales graves. A la hora de relacionarse con las personas o de tener relaciones saludables, querer estar pendiente de este tipo de plantes o incluso disfrutar de su presencia puede llegar a ser peligroso para la salud mental. El caso de Kate está llevado hasta un extremo un tanto distinto para mantener viva su pasión matrimonial.
Kate visita a su marido árbol con regularidad, en sus redes sociales aparecen fotos con él en las que presume de tener a la tranquilidad personificada. Nunca se queja y siempre escucha, es poco hablador, pero eso no impide a su mujer contarle su día a día. Casarse con un árbol es una de las últimas locuras de una defensora de la naturaleza que consiguió llamar la atención de los medios hace un año, el resultado de esta acción ha servido para mantener un pequeño bosque en pie.
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