El iPhone 7 todavía supera al Samsung Galaxy S8
El iPhone 7 de Apple todavía iguala, e incluso supera en algunos aspectos el rendimiento del nuevo Samsung Galaxy S8. Al menos es lo que se puede deducir de los primeros análisis que comparan frente a frente el rendimiento y la velocidad de los dos grandes rivales del mundo de los smartphones.
El Samsung Galaxy S8, con su nuevo chipset Exynos 8895 de Samsung, con el más novedoso proceso de fabricación de 10 nanómetros y sus 4GB de RAM, no es capaz de superar a la eficiencia y potencia del iPhone 7 Plus y su chip A10 Fusion diseñado por la propia Apple. Es más, en algunos tests de “fuerza bruta” el iPhone todavía es capaz de superar al Galaxy S8 y en el resto como poco los iguala, lo que resulta ciertamente sorprendente si tienes en cuenta que el teléfono de Apple lleva ya 8 meses en el mercado. Además, el iPhone 7 tiene una dotación de RAM menor, y la mitad de núcleos de procesador, lo que demuestra que la compañía de Tim Cook sigue incontestable en este aspecto.
Por supuesto, puedes ver ya una buena cantidad de mediciones de rendimiento del iPhone 7 Plus y de los Galaxy S8 y comprobarás como con herramientas como AnTuTu, ambos terminales están muy a la par, alrededor de los 160.000 puntos; mientras que con programas como Geekbench están igualados en las pruebas multi núcleo con uno 5.900 puntos en ambos casos; pero el iPhone 7 casi duplica el rendimiento del Galaxy S8 en las pruebas con un único núcleo.
Galaxy S8 frente al iPhone 7 ¿qué pasa en el mundo real?
Sin embargo, más allá de lo que pueden mostrar las pruebas con programas de medición, ya puedes encontrar en Internet algunos vídeos como el de EverythingApplePro, que muestra frente a frente los dos teléfonos en tareas del mundo real. La conclusión es que ambos terminales son endiabladamente rápidos; pero el iPhone 7 sigue sacando ventaja cuando se trata de cargar juegos de gran exigencia en gráficos o a la hora de codificar películas 4K. En tareas más sencillas y a la hora de lanzar otras aplicaciones o navegar por Internet, las diferencias son mínimas y con algunas está por delante el Galaxy S8, mientras que en otras es el iPhone 7 el que gana la partida.
Con todo ello, la conclusión que puedes sacar es que los dos súper gama alta de las dos principales plataformas móviles son “monstruos” de la potencia, que pueden afrontar cualquier tarea pesada o abrir numerosas aplicaciones al tiempo sin mostrar síntomas de cansancio. Sin embargo, se puede decir que Apple, incluso medio año después, sigue dando la talla frente al más poderoso móvil Android del mercado, lo que significa que en septiembre, el iPhone 8 no tendrá mucho problema en volverse a poner por delante al menos en este aspecto.