Sánchez pasa otra vez por el aro de Puigdemont
Va por ahí presumiendo de fino estadista -el único capaz de ahormar mayorías- pero en realidad Pedro Sánchez sigue siendo una marioneta en manos de Carles Puigdemont, líder de Junts y el único capaz de doblegarle. Y como muestra, un botón, por si no hubiera bastantes. El Gobierno ha cumplido con la exigencia de Puigdemont de retirar cualquier mención en el informe de Europol al separatismo violento catalán y a las actividades de los CDR. Lo hizo después de que Junts se lo plantease como requisito para apoyar su investidura, entendiendo que ponía en riesgo la amnistía y este año Sánchez ha cumplido su promesa, enviando un borrador con los datos españoles en el que ni se mencionaba a Cataluña.
Para que luego digan desde el Gobierno que Puigdemont ya está amortizado. En el último informe de la organización policial europea ya no hay ni rastro del «terrorismo autóctono» catalán en el apartado sobre «etnoterrorismo y separatismo». De esta forma, el nuevo informe de Europol arma de argumentos al separatismo de cara a las causas pendientes que aún tiene abiertas por delitos de terrorismo y que podrían caer vía amnistía.
En 2023, cuando Sánchez no estaba todavía en manos de Puigdemont, un párrafo de Europol soliviantó al independentismo al mencionar que en España «los movimientos independentistas catalán y vasco son actualmente los más activos y violentos dentro del escenario separatista». Entonces se detallaba como grupúsculos, entre los que se incluía a los CDR, «combinan el separatismo con puntos de vista de extrema izquierda, centrándose en mensajes contra el Estado español y sus instituciones, así como contra temas más amplios como el capitalismo. Además, han surgido varios pequeños grupos nuevos en los círculos separatistas de izquierda en España».
El Ministerio de Interior de Marlaska se ha encargado de transmitir a la Policía europea que de aquello ya no hay nada de nada. Por la cuenta que le tiene. Puigdemont sigue imponiendo el peso de sus siete votos y Pedro Sánchez ha vuelto a pasar por el aro.