La Guardia Civil militar

La Guardia Civil militar

El debate sobre la desmilitarización de la Guardia Civil viene de lejos. La Policía Armada cambió su uniforme gris al marrón en 1978 y al azul en 1986, unificándose con el cuerpo policial de investigación en la Policía Nacional, híbrido entre civil y militar. Quedó la Guardia Civil de verde, con tricornio y militar. ¿Tradición, resistencia a evolucionar?

Acabamos de ver a un guardia civil ingresar en prisión por discutir estando juntos de patrulla con un cabo 1º, superior jerárquico. 10 meses de cárcel. ¿Tiene familia, hijos, pareja? Barbaridad inexplicable en una democracia. Desproporción aberrante ajena a valores de esta sociedad. Brutal injusticia, como mantener expulsados desde mediados de los noventa al sargento Morata, al cabo Rosa y a los guardias Piñeiro y Linde (ya fallecido), por promover asociaciones en la Guardia Civil. Son la UMD verde (ellos actuaron aprobada la Constitución, legalmente, los “umedos” no). Una infamia. Las asociaciones profesionales apoyan resolverlo. La ministra de Defensa, también. Varias PNL aprobadas en el Congreso no han servido para nada. Hagan justicia con ellos. Sean políticos dignos, no de pandereta.

La Guardia Civil puede mantener su misma estructura, jerarquía, disciplina y mejorar su eficacia sin el Código de Justicia Militar. Debe cambiar su despliegue territorial, cerrar cientos de cuarteles inoperativos y dejar de competir con la Policía Nacional en las ciudades. Hay extensas zonas en España donde roban impunemente y la patrulla tarda días en llegar. Sobran cuarteles y faltan coches. La Guardia Civil sigue distribuida territorialmente como cuando iban a pie o a caballo. Su estrategia principal es competir con Policía Nacional en Internacional, Judicial, Científica… descuidando otras tareas. Sobran mandos de máxima graduación en ambas instituciones. La competencia entre ellos es brutal. La de ser el cuerpo de seguridad más antiguo de España, insana. Hay periodos de sátrapas y absolutistas que los usaron contra el pueblo de los que nadie debería sentirse orgulloso. Reconocer la historia no es estar orgullosos de la Inquisición.

La Policía Nacional debe cumplir la ley. Sobra obediencia debida ante órdenes ilegales como identificar sin razón para hacerlo a ciudadanos en la vía pública. Son varios millones cada año. ¿Por qué no se respetan derechos civiles de la ciudadanía? El coche policial parado identificando ilegalmente deja de patrullar y suben los delitos, dato empírico que no importa a nadie. Importa mejorar la estadística en la cuenta de resultados de los mandos. El clima social no está para seguir abusando con identificaciones. Los policías corren riesgos.

Guardia Civil y Policía deben garantizar la seguridad de la ciudadanía y el Estado, no servir a sus cúpulas dirigentes. La Guardia Civil debería asumir la competencia en fronteras. Que dejen de crear unidades duplicadas con las de Policía Nacional en las ciudades y se encarguen del control de personas y resguardo fiscal en fronteras aéreas, marítimas y terrestres. Y la Policía que se dedique a patrullar ciudades e impedir que haya miles de llamadas cada mes sin atender al 091. Los miembros de la Guardia Civil que quieran ser menos militares que pasen a la Policía Nacional respetando todos sus derechos, aunque el funcionamiento y abuso de poder de algunos mandos es similar al de la Guardia Civil. Que los guardias civiles tengan sindicatos. Hay ejércitos europeos cuyos soldados profesionales están sindicados. Y que los policías nacionales puedan afiliarse a sindicatos de trabajadores, como en toda Europa. No es menos disciplinada la Policía Nacional híbrida civil-militar que la Guardia Civil militar. ¿Por qué hoy policías y guardias civiles son las fuerzas de seguridad del Estado con menos derechos asociativos de Europa? ¿España es diferente?

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