¿Qué es el gusano del corazón en perros? Causas y síntomas
Es una enfermedad de carácter grave
El rincón de tu casa que tu perro jamás debería pisar, según un experto
El truco para cortarle las uñas a tu gato en 5 minutos y sin esfuerzo
Cuando adoptamos un perro como mascota, más allá de los juegos y ratos de diversión con él, debemos pensar en su salud. Hay razas que son más propensas a sufrir determinadas enfermedades que otras, y debemos tomar todas las medidas preventivas necesarias: calendario de vacunación, visitas al veterinario… El gusano del corazón es una enfermedad común en perros, y puede llegar a causar la muerte. Por suerte existe tratamiento, aunque es complejo, así que lo mejor que podemos ofrecer es proteger a nuestro can de los parásitos.
Si nunca has oído hablar de esta enfermedad, debes saber no se contagia de perro a perro, sino que tiene que intervenir un mosquito. Es decir, un mosquito pica a un animal infectado, y transmite las larvas jóvenes al riego sanguíneo del próximo perro sano al que pica.
Las larvas se desarrollan en los tejidos del animal hasta que alcanzan la madurez y se alojan en el corazón y en las arterias pulmonares. La parasitosis obstaculiza parcial o totalmente el riego sanguíneo en tiempo récord ya que en los casos más graves puede haber hasta 100 gusanos de 30 centímetros de longitud concentrados en los tejidos.
Síntomas del gusano del corazón en perros
Algo muy importante de esta enfermedad es que pueden pasar hasta seis meses desde que los parásitos entran en el organismo del can hasta que alcanzan su madurez y empiezan a aparecer los primeros síntomas. Por lo tanto, uno de los principales problemas que presenta es que en las primeras etapas no hay signos de alerta, y cuando acudimos al veterinario con nuestra mascota a veces es demasiado tarde.
Aunque los síntomas pueden variar entre un perro y otro, los más comunes son: dificultad respiratoria, cansancio sin razón aparente, aumento del ritmo cardíaco ante el más mínimo esfuerzo, falta de apetito, hemorragias nasales, nerviosismo, irritabilidad y desmayos. En los casos más graves los perros pueden sufrir hinchazón debido a la acumulación de líquidos y convulsiones.
El diagnóstico es muy sencillo porque basta un simple análisis de sangre para comprobar que el can sufre problemas de coagulación y animas. Los riñones y el hígado también pueden verse afectados. Una vez confirmada la enfermedad, el tratamiento suele durar varios meses, y la primera fase consiste en la administración de fármacos para eliminar los gusanos y las larvas del organismo.
Temas:
- Perros