Ni una ni cuatro veces al día: ésta es la frecuencia con la que debes sacar a pasear a tu perro


Tener un perro como mascota es una experiencia muy gratificante, pero también conlleva una gran responsabilidad. Cada raza cuenta con una serie de necesidades en lo que respecta al ejercicio físico; algunas sólo necesitan paseos cortos para mantenerse saludables, mientras que otras requieren un mayor desgaste energético. A pesar de estas diferencias, los veterinarios y expertos en comportamiento animal tienen claro cuál es la frecuencia ideal para pasear al perro.
Lo primero a tener en cuenta es que sacar al perro a pasear va muchísimo más allá de sus necesidades fisiológicas. Los paseos son fundamentales para su desarrollo físico y mental, ya que le permiten descubrir su entorno y relacionarse con otro canes. Estudios han demostrado que la insuficiencia de paseos puede dar lugar a problemas de salud y trastornos del comportamiento, por lo que es esencial prestar especial atención a esta cuestión.
¿Cuál es la frecuencia ideal para pasear al perro?
Algunos hay quienes consideran que salir con su mascota es simplemente una obligación para que el animal haga sus necesidades. Sin embargo, los beneficios de los paseos van más allá, mejorando la salud física y mental del animal, y fortaleciendo el vínculo entre éste y su dueño.
El beneficio más destacado de los paseos es el ejercicio. Los perros necesitan moverse para fortalecer su sistema muscular, mantener un peso saludable y evitar problemas de comportamiento relacionados con la falta de estimulación. Los veterinarios advierten de que el número de perros con obesidad ha aumentado a un ritmo alarmante en los últimos años, y caminar es la mejor forma de prevenir esta enfermedad.
Los perros son curiosos por naturaleza, y para ellos cada paseo supone una gran fuente de estímulos, con nuevos sonidos, olores, personas y otros animales. Estos elementos les ayudan a mantener su mente activa, previniendo la ansiedad y reduciendo el aburrimiento. Sin los paseos, pueden desarrollar comportamientos destructivos, como ladrar sin parar o morder mueble.
A esto hay que sumar que el paseo es un momento de conexión muy especial entre el perro y su dueño, reforzando su relación de confianza y mejorando la convivencia. Al principio puede ser difícil que el animal no tire de la correa o atienda a órdenes básicas como «quieto» o «sentado», pero con el entrenamiento adecuado es posible convertir el paseo en una experiencia muy placentera.
Finalmente, cabe señalar que los perros son animales de rutinas, y los paseos les proporcionan seguridad. Saber que van a salir a la calle en determinados momento del día (preferiblemente siempre a la misma hora), les ayuda a reducir la ansiedad.
Raza y edad
En lo que respecta a la frecuencia ideal para pasear al perro, es esencial tener en consideración tanto la raza como la edad del animal, así como su estado de salud y su nivel de energía.
Los cachorros son muy enérgicos, pero todavía se encuentran en fase de crecimiento y, por ende, su resistencia física es limitada. Lo ideal es sacarlos a pasear al menos cuatro o cinco veces al día durante 15 minutos. Los paseos tienen que ser tranquilos, de manera que tengan tiempo para socializar y explorar el entorno.
En la edad adulta, los perros se encuentran en su mejor momento físico, siempre y cuando no tengan ningún problema de salud.
- Razas pequeñas y mini: pesar de su tamaño reducido, estas razas necesitan actividad diaria. Lo ideal es que acumulen entre 30 y 40 minutos de paseo, repartidos en dos o tres salidas.
- Razas medianas: estos perros requieren entre 60 y 90 minutos de actividad diaria, distribuidos en varios paseos. Algunas razas, como el Beagle, tienen mucha energía y necesitan más estimulación para evitar conductas destructivas.
- Razas grandes: necesitan rutinas más exigentes; entre una y dos horas de actividad al día, divididas en dos o tres salidas. Son perros atléticos que disfrutan de largos recorridos, obediencia y, cuando es posible, correr en espacios abiertos.
- Razas gigantes: aunque imponen por su tamaño, no requieren tanta actividad como podría pensarse. Con alrededor de 1 hora de paseo diario tienen suficiente. Su peso hace que se cansen antes, por lo que agradecen recorridos tranquilos y sin excesos.
Los perros mayores también necesitan mantener una rutina de paseos para conservar la movilidad de sus articulaciones y evitar el sobrepeso. Lo ideal es sacarlos entre dos y tres veces al día, con paseos de 20 a 30 minutos. Es fundamental elegir superficies cómodas que no lesionen sus patas ni sobrecarguen sus articulaciones, evitando suelos muy duros o irregulares.
En definitiva, no exista una respuesta universal acerca de la frecuencia ideal para sacar al perro a pasear. Los cachorros requieren paseos breves y frecuentes, los adultos necesitan rutinas adaptadas a su tamaño y energía, y los seniors agradecen caminatas tranquilas que mantengan su movilidad. . Lo importante es que la salida sea una actividad que contribuya al bienestar del animal y refuerce el vínculo con su dueño.