Carlos Sánchez Mato

El jefe económico de IU carga contra los ministros socialistas del Gobierno en el que participa Garzón

Carlos Sánchez Mato junto a Alberto Garzón. (Foto: IU)
Carlos Sánchez Mato junto a Alberto Garzón. (Foto: IU)

Carlos Sánchez Mato, responsable de Políticas Económicas de Izquierda Unida e imputado por el caso Open de Tenisusa su Twitter para cargar contra muchos de los ministros del PSOE del Gobierno de coalición en el que su jefe de filas, Alberto Garzón, es ministro de Consumo. De esta forma, el concejal de Economía y Hacienda del Ayuntamiento de Madrid hasta que fue cesado por Manuela Carmena personifica la voz más crítica de la cúpula de IU contra el Gobierno central. Entre otros, señala a los ministros Isabel Celaá (Educación), Arancha González Laya (Asuntos Exteriores), José Luis Escrivá (Seguridad Social), Nadia Calviño (Economía) o al propio presidente Pedro Sánchez. Todos ellos son objeto de sus afilados tuits.

Al presidente del Gobierno le reprocha su reunión con el opositor venezolano Leopoldo López. «El secretario general del PSOE se reúne con Leopoldo López, condenado por instigar manifestaciones que causaron 43 muertos en 2014. Aquí por subirse a un coche y pedir tranquilidad, los Jordis fueron condenados a 9 años por sedición. No hubo ni un herido. ¿Cuándo te reúnes con ellos?», critica Carlos Sánchez Mato.

En políticas de Exterior, el ex concejal carga contra la ministra Arancha González Laya: «Supongo que el Ministerio de Exteriores es consciente de que ha ayudado a Leopoldo López a quebrantar una condena. Soy partidario de ayudar a todos los que huyen de condenas que creen injustas. Pero a todos». «Ábranse ya las embajadas españolas de todo el mundo a los perseguidos», pide este economista que añade su particular versión de los hechos. Sostiene que dar soporte al opositor venezolano es «enviar apoyo a un golpista, eso sí, en este caso muy violento».

Por otra parte, el cerebro económico de IU cargó contra Isabel Celaá, titular de Educación. Citando un tuit de la ministra en el que apostaba por la cooperación público privada, Sánchez Mato arremetió: «Para que la educación sea la fuerza transformadora que necesita nuestra sociedad, no puede mercantilizarse». El economista pedía «menos ‘alianza público privada’ para alimentar a quien hace negocio con ella y más presupuestos para la enseñanza pública que garanticen que la renta no sea un obstáculo».

También en relación a los Presupuestos, Sánchez Mato dirige sus misiles al Gobierno de coalición en forma de tuits contra Carolina Darias, responsable de la cartera ministerial de Función Pública. «No podemos pedir eficiencia en la concesión de ayudas sociales, rapidez en gestión de ERTEs y respuesta veloz en políticas preventivas de salud pública, si no reponemos a mayor ritmo las plantillas estatales desmanteladas por el letal efecto de las políticas de la derecha», escribió el hoy profesor en la Universidad Complutense.

El ministro José Luis Escrivá (Inclusión, Migraciones y Seguridad Social) también recibe las críticas del colaborador de Alberto Garzón. Sánchez Mato le afea una contratación de una consultora para reforzar la búsqueda de irregularidades en la Seguridad Social: «La detección de falsos autónomos y la lucha contra el fraude ni se puede subcontratar, ni externalizar ni privatizar. La obligación del Gobierno es gestionar de forma directa los servicios y las políticas públicas. No hay justificación técnica para contratar a Accenture».

También contra Escrivá, Sánchez Mato carga las tintas por sus planes con las pensiones. Ante el anuncio del ministro de un fondo para completar subsidios, el economista de IU señala: «Un trabajador ahorrando el 1% y con igual aportación de la empresa durante 20 años, tendría derecho a 50 euros al mes». A continuación, insinúa que hay un principio de tratos de favor: «Ningún sentido tienen estos fondos de pensiones privados con ventajas fiscales… salvo dar beneficios a la entidad financiera gestora».

Por último, cabe destacar los dardos de Carlos Sánchez Mato que lanza a la vicepresidenta económica, Nadia Calviño, que, como reconoce en sus charlas es la ministra de la que menos se «fía». «Calviño nombra a Pedro Comín director del Sepblac, el Servicio Ejecutivo de la Comisión de Prevención del Blanqueo de Capitales. Un lince. ¿Quién mejor que el inspector del Banco de España que avaló y defendió las cuentas de la salida a Bolsa de Bankia?», critica este economista que no se calla sus pullas a ministros de su Gobierno.

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