La Audiencia de Barcelona absuelve al ex detective de Método 3 acusado de colaborar en un secuestro
La Audiencia Provincial de Barcelona ha absuelto de todos los cargos al ex detective de la agencia Método 3 Julián Peribañez, al que la Fiscalía acusaba de haber colaborado en un secuestro para recuperar una deuda. Peribáñez estuvo representado por el abogado José María Fuster-Fabra en el juicio, que se ha celebrado en Barcelona entre el pasado 29 de enero y el 13 de febrero.
La sentencia dictada por la Audiencia de Barcelona absuelve a Peribáñez de todos los cargos, tras constatar que se limitó a «intentar ayudar a un vecino al que posiblemente habían estafado para esclarecer lo ocurrido y tratar de averiguar los hechos en su condición de detective privado».
Al declarar ante el juez, Peribáñez explicó que un vecino de la urbanización de Gavà en la que residía, el acusado Moisés C.V., le comunicó que tenía problemas para recuperar una inversión de 25.000 euros que había realizado en una operación inmobiliaria. Al examinar los documentos, el detective comenzó a sospechar que Moisés había sido víctima de una estafa, ya que en el contrato firmado no aparecía el NIF de la empresa que, como pudo comprobar luego, ni siquiera existía.
Peribáñez acompañó en coche a Moisés y a la mujer a la que había entregado el dinero, Estefanía R.B., hasta una oficina situada en el Paseo de Gracia de Barcelona, donde supuestamente se encontraba el despacho del empresario que debía realizar la inversión. Sin embargo, una vez allí comprobaron que el local estaba completamente vacío –de hecho, se había practicado un desahucio– y el empresario había desaparecido.
La mujer estuvo tres días retenida
Todo indicaba que, efectivamente, se había tratado de una estafa. Moisés llevó entonces a la mujer a su casa de Gavà y la tuvo retenida (en colaboración con otras dos personas acusadas en el juicio) durante cerca de tres días: le advirtió que sólo la dejaría marchar cuando lograra reunir los 25.000 euros que le debía.
Durante este tiempo, la dejó utilizar el teléfono móvil para ponerse en contacto con algunos familiares y conocidos, con el fin de que intentara reunir los 25.000 euros. Durante la celebración del juicio, Peribáñez explicó que en ningún momento tuvo conocimiento de que la mujer estaba retenida: «solamente veía a Estefanía en las zonas comunes [de la urbanización], donde había mucha gente. Y la veía bien, aunque preocupada», explica la sentencia.
La mujer fue trasladada luego por los otros tres acusados a un inmueble de Prat de Llobregat. Finalmente, fue liberada por los Mossos d’Esquadra el 1 de agosto de 2013 en Gavà, cuando salía de una oficina de Correos a la que había acudido (junto a dos de sus captores) a cobrar un giro de 3.000 euros que le había puesto su marido, para saldar parte de la deuda.
Durante el juicio, tanto la propia víctima como los otros tres acusados negaron por completo que Julián Peribáñez tuviera cualquier implicación en el secuestro. Moisés C.V. y sus dos colaboradores pactaron con la Fiscalía una pena de dos años de cárcel (con la atenuante de dilaciones indebidas en la instrucción de la causa) y aceptaron indemnizar a la víctima con 8.600 euros.
Fue espiado por los Mossos
Peribáñez ha sido absuelto por el tribunal, de acuerdo con las pruebas y testimonios recogidos. El detective ha comunicado que estudia emprender acciones judiciales contra los agentes de los Mossos d’Esquadra que promovieron esta acusación contra él.
Tal como acreditan los informes que la Comisaría de Información intentó destruir en la incineradora de Sant Adrià de Besós en octubre de 2017 (pocas horas antes de la aplicación del artículo 155), Julián Peribáñez fue objeto de seguimientos de los Mossos d’Esquadra durante semanas, cuando mantenía diversos encuentros con periodistas y líderes políticos.