Irán y Pakistán: claves para entender la tensión entre las potencias nucleares y cómo afecta a la zona
Pakistán ha lanzado este jueves una serie de ataques aéreos en el interior de Irán, matando al menos a nueve personas en represalia a un golpe similar perpetrado días antes por Teherán, aumentando la tensión con el país vecino a medida que se recrudece el conflicto en toda la región.
Los ataques, sin precedentes, perpetrados por Pakistán e Irán a ambos lados de su frontera, tienen como objetivo los grupos terroristas baluches, a los que se acusan de forma mutua de dar apoyo.
El enfrentamiento entre Irán y Pakistán, dos potencias nucleares, se produce en un momento de tensión en Oriente Próximo por la respuesta de Israel contra el grupo terrorista de Hamás en la Franja de Gaza, y tras los ataques aéreos iraníes de este lunes en Irak y Siria, respuesta a un atentado en Irán de ISIS en la ceremonia de conmemoración de la eliminación de Estados Unidos del general de la Guardia Revolucionaria iraní Qasem Soleimani.
Contagio en la zona
Irán y Pakistán, potencias nucleares, se miran con recelo desde hace mucho tiempo por los atentados, aunque los ataques de esta semana se deben a presiones políticas internas.
Irán se enfrenta a disturbios contra su teocracia y a presiones para que actúe desde el atentado suicida de ISIS en un contexto en el que apoya a diferentes grupos terroristas en la región: Hamás en Gaza, Hezbolá en el Líbano y los rebeldes hutíes en Yemen contra Israel. Pakistán, por su parte, no podía dejar sin respuesta los ataques aéreos de Irán del martes, y se enfrenta a unas elecciones generales cruciales en febrero en las que su ejército es una poderosa fuerza política.
Paso de terroristas y opio
Irán y Pakistán comparten una frontera de 900 kilómetros, por la que cruzan de forma libre traficantes y terroristas. La ruta es también clave para los envíos mundiales de opio procedentes de Afganistán.
Estos ataques renuevan los interrogantes sobre su propia preparación militar, en particular sobre sus sistemas de radar y defensa antiaérea. Para Pakistán, son cruciales, ya que las tensiones con India, su rival nuclear, se mantienen siempre en un punto de ebullición.
En estas tensiones, hay que tener en cuenta las consideraciones geopolíticas: Pakistán depende de cazas estadounidenses, chinos y franceses para su fuerza aérea. Estados Unidos y China han ya a la moderación.
Últimos ataques
Este lunes Irán ha disparado misiles balísticos contra Siria y el norte de Irak, controlado por los kurdos, declarando que su objetivo era el grupo terrorista ISIS y la agencia de espionaje israelí Mossad, ambos implicados en la operación de Kerman hace dos semanas durante la ceremonia de conmemoración de la eliminación de Estados Unidos del general de la Guardia Revolucionaria iraní Qasem Soleimani, como se ha indicado anteriormente. El ataque contra Irak alcanzó un edificio en la ciudad septentrional de Irbil. Cuatro civiles murieron y seis resultaron heridos en el ataque, según las autoridades locales. A continuación, Irán atacó la provincia noroccidental siria de Idlib, último bastión de la oposición en el país. Sin embargo, atacar Pakistán, potencia nuclear, aumenta la tensión.