Una ciudad de Texas en estado de emergencia por la llegada de 13.700 inmigrantes ilegales en una semana
El alcalde dice que la avalancha ha sobrepasado los recursos locales, especialmente los de la policía y los bomberos
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La población estadounidense de Eagle Pass, ubicada en la frontera entre Texas y México, se declaró en estado de emergencia este miércoles, tras la llegada masiva de unos 4.000 inmigrantes que cruzaron ilegalmente la frontera desde el país vecino. Dicha avalancha se suma a las 2.500 personas que llegaron el pasado lunes, y a otros 7.200 inmigrantes ilegales que fueron detenidos hace una semana.
El alcalde de la ciudad, de algo menos de 30.000 habitantes, Rolando Salinas señaló que la ciudad está «desbordada» por el aumento de inmigrantes que llegan a diario, muchos de ellos de Venezuela, que han saturado el único centro para inmigrantes existente en la ciudad fronteriza.
Salinas advirtió que no todos los inmigrantes «vienen en paz» y que muchos de ellos son hombres solteros que no quieren escuchar las indicaciones de las autoridades y abandonan las instalaciones. También dijo que la afluencia de la última semana ha sobrepasado los recursos locales, especialmente los de la policía y los bomberos.
Por el momento, muchos de los inmigrantes detenidos se encuentran agrupados en otra instalación desbordada en uno de los dos puentes internacionales que tiene la ciudad.
El alcalde dijo que le habían informado que otras 4.000 a 8.000 inmigrantes en varios grupos separados también se dirigían a la ciudad. «Si este jueves tenemos otra ola, será Del Río otra vez», manifestó para referirse al incidente ocurrido hace casi dos años, cuando 15.000 inmigrantes haitianos acamparon debajo del puente en la vecina Del Río, Texas, provocando una importante crisis humanitaria.
El proceso de identificación de los inmigrantes suele tardar varios días, pero podría llevar más tiempo debido a la enorme afluencia, dijeron fuentes fronterizas, y agregaron que algunas personas están siendo enviadas a instalaciones fronterizas en Laredo y El Paso para ser procesadas, pero eso crea un efecto dominó a medida que son procesados.
Todos los inmigrantes son analizados para detectar antecedentes penales o entradas ilegales previas a Estados Unidos, y aquellos que no pasan la prueba son marcados para una posible expulsión en lugar de permitirles ingresar a Estados Unidos, dijeron las autoridades.
Entre los ahora detenidos en Eagle Pass se encuentra Roberto Emilio Vásquez-Santamaria, un inmigrante peruano de 64 años acusado por el asesinato de otro hombre en la ciudad de Texas, informó Fox News.
La crisis de Texas es sólo la última en la que los inmigrantes han puesto a prueba los límites de las capacidades de las patrullas fronterizas, alentados por los cárteles de la droga, que se aprovechan de la confusión reinante.
En la parte occidental de Texas, El Paso abrió un refugio de emergencia después de una avalancha de inmigrantes también llegara la semana pasada.
En Tucson, Arizona, y San Diego, California, los extranjeros están siendo liberados en comunidades fronterizas mientras los funcionarios federales se están quedando sin espacio en los centros de procesamiento diseñados para identificarlos.
Las imágenes en X (antes Twitter) de la oleada de migrantes han suscitado innumerables críticas contra la gestión de Joe Biden. Un usuario escribió: «Es pase libre para todos en Eagle Pass ahora mismo. Cruce ilegal masivo que dura más de una hora y media. Casi dos años después del día en que vimos a más de 15.000 haitianos bajo el puente en Del Río, ahora tenemos miles de venezolanos, predominantemente, reunidos bajo el puente de Eagle Pass».