Juez y parte: La magistrada que juzgará a Trump donó 5.000 euros a la campaña de Obama

La juez asignada para el último caso de Donald Trump y las elecciones de 2020 del fiscal especial Jack Smith invirtió miles de dólares en las arcas de la campaña de Barack Obama de 2008 y 2012, según muestran los registros oficiales publicados este miércoles por los medios estadounidenses.

Se trata de la magistrada federal de distrito, Tanya Chutkan, nombrada por el ex presidente Barack Obama en 2014 y que contribuyó aproximadamente con 5.000 euros a su campaña presidencial y al fondo de los demócratas entre 2008 y 2012.

Las donaciones de Chutkan se realizaron mientras trabajaba en Boies Schiller Flexner, una importante firma legal de abogados con más de una docena de oficinas en los Estados Unidos. También en 2008 donó 300 dólares a la campaña de la senadora demócrata, Kirsten Gillibrand, aunque la base de datos de la Comisión Federal de Elecciones que contiene toda esta información no incluye su respaldo a ningún candidato federal desde septiembre de 2012.

Los vínculos de la magistrada con el ex presidente Obama ha creado un fuerte malestar entre los republicanos que han vuelto a insistir que las acusaciones contra Trump y el caso están trufados de motivaciones políticas, ya que el Partido Republicano continúa manifestando la idea de que el Departamento de Justicia y las agencias de inteligencia actúan permanentemente contra el discurso de los conservadores.

Chutkan recibió el encargo de forma aleatoria, aunque según explica el periódico The Washington Post, el proceso de asignación de causas es complejo y hay algunos factores que pueden determinar quién acaba encargándose de cada caso.

Entre estos factores se encuentran las causas recientes de los jueces o cuántos procesos tienen en curso. Chutkan ya ha juzgado a algunos de los seguidores de Trump que el 6 de enero de 2021 irrumpieron en el Capitolio, tratando de impedir la confirmación de la victoria electoral de Joe Biden.

Según recogen medios como Axios o The Hill, la magistrada ha actuado con dureza en estos casos, en ocasiones dando sentencias más estrictas de las que pedía la Fiscalía.

En concreto, The Hill cita el ejemplo de una pareja que retransmitió en directo cómo entraban en el Capitolio en el momento del asalto. El Departamento de Justicia solicitó una pena de reclusión domiciliaria pero la jueza Chutkan sentenció al marido a 20 días de cárcel y a la mujer a 14.
«No entraron simplemente por una puerta. Atravesaron una ventana rota… Eran perfectamente conscientes de la violencia que había precedido a su acceso», explicó entonces la magistrada.

Sin embargo, la juez defendió a los manifestantes de Black Lives Matter de las protestas del verano de 2020 en comparación con los hechos acontecidos en el edificio del Capitolio el 6 de enero de 2021.

La juez manifestó que comparar las acciones de los manifestantes violentos que causaron el caos en el verano de 2020 tras la muerte de George Floyd con los alborotadores que interrumpieron la sesión especial del Congreso el 6 de enero de 2021 fue una «falsa equivalencia».

«La gente se reunió en todo el país para protestar por el asesinato violento de un hombre desarmado por parte de la policía. Algunos de esos manifestantes se volvieron violentos», dijo Chutkan en una audiencia en octubre de 2021. «Pero comparar las acciones de las personas que protestan, en su mayoría pacíficamente, por los derechos civiles, con las de una turba violenta que busca derrocar al gobierno elegido legalmente es una equivalencia falsa e ignora un peligro muy real que los disturbios del 6 de enero representaron para la fundación de nuestra democracia».

Los episodios violentos producidos tras la muerte de Floyd en mayo de 2020 causaron varias muertes y lesiones, toques de queda en la mayoría de las ciudades del país y daños estimados entre 1.000 y 2.000 millones de dólares. Los disturbios en el Capitolio del 6 de enero de 2021 afectaron sólo el área de Washington y causaron daños estimados en menos de 3 millones, la muerte de una manifestante y lesiones a varios otros.

Trump fue acusado este martes de cuatro cargos en relación con las elecciones de 2020: conspiración contra EEUU, conspiración para obstruir un procedimiento oficial, obstrucción e intento de obstruir un procedimiento oficial y conspiración contra los derechos, según el fiscal especial del caso Jack Smith.

El ex presidente dijo en un comunicado el martes que los cargos eran «nada más que el último capítulo corrupto en el intento patético y continuo de la familia criminal Biden y su Departamento de Justicia armado para interferir con las elecciones presidenciales de 2024». John Lauro, abogado de Trump, se refirió a la acusación como «un ataque a la libertad de expresión y la defensa política».