Cómo saltar en skate

Patinar con skate es algo que gusta a muchos niños y jóvenes, y aunque la clave es la práctica, una de las primeras cosas que seguro quieren hacer es saber cómo saltar con un skate. Para ello, podemos seguir la guía de pasos que te ofrecemos a continuación y conseguirás no solo saltar con tu tabla, sino que también lograrás equilibrarte mejor tras el salto.

Saltar con la tabla de skate es algo esencial para cualquier patinador. No solo para realizar piruetas y giros en el aire, sino que a veces puede que mientras patinas tengas que evitar obstáculos en el camino, de modo que será bueno aprender a levantar tu tabla y para ello, os explicamos cómo hacer el salto más sencillo y famoso de todos: el «ollie», inventado a finales de los años 70 por Alan «Ollie» Gelfand.

Pasos para saltar en skate

El «Ollie» es una técnica de salto que permite a los patinadores saltar sobre los obstáculos y sobre los bordillos, etc. Lo sorprendente del «Ollie» es la forma en que el monopatín parece adherirse a los pies del patinador en el aire. Si tú también deseas saltar de este modo, sigue entonces los pasos a continuación.

1. Justo antes de que un patinador realice un salto con su tabla como el «ollie», se deben tener en cuenta tres fuerzas que actúan en el monopatín. Una de estas fuerzas es el peso del patinador, otra es la fuerza de gravedad en la tabla y finalmente, se debe tener en cuenta la fuerza del suelo que empuja hacia arriba en el monopatín. Estas tres fuerzas se deben equilibrar a cero y de este modo, conseguir que  la tabla no se nos vaya al saltar, sino que se quedará bajo nuestros pies.
2. Otro factor a tener en cuenta cuando estamos realizando un salto con el skate es la posición de nuestro cuerpo. Subido sobre la tabla, debes tener un pie justo detrás de la posición de las ruedas delanteras y el otro apoyado en la parte trasera (que está ligeramente inclinada). Los pies deben estar colocados en posición paralela, con las rodillas ligeramente dobladas, y el cuerpo ligeramente curvado.
3. Estar un poco agachado te permitirá tener el centro de gravedad de tu cuerpo más bajo y de este modo realizar un salto más alto. Las rodillas dobladas te permitirán impulsar el cuerpo para elevarte.
4. Para hacer el salto, debes presionar ligeramente el pie que está apoyado atrás, de modo que levantes el skate. Te agachas un poco, presionas con el pie, notas como el skate se levanta y sin mover los pies, saltas. Al haber movido el pie de atrás, para presionar, será cuando la parte trasera del skate golpee el suelo, y este ejercerá una gran fuerza hacia arriba sobre la parte traser. El resultado de esta fuerza hacia arriba es que la tabla rebota y comenzará a subir, esta vez alrededor de tu centro de masa.
5. Ahora que el tablero está completamente en el aire, tendrás que deslizar tu pie delantero hacia adelante, utilizando la fricción entre su pie y la superficie rugosa del tablero para arrastrar el tablero hacia arriba aún más.
6. A la vez, tienes que comenzar a empujar tu pie delantero hacia abajo, levantando las ruedas traseras y nivelando el skate.
7. Mientras tanto, tienes que levantar  un poco el pie trasero para apartarlo ligeramente de la parte trasera ascendente de la tabla. Si ejecutas este movimiento a la perfección, tu pie trasero y la parte trasera del skate se elevan en perfecta armonía, aparentemente «pegados».
8. La tabla estará ahora nivelada a su altura máxima. Con ambos pies tocando el skate, tienes que comenzar a caer bajo la influencia de la gravedad, de modo que el skate permanecerá en tus pies.
9. Por último debes dejar que la gravedad eventualmente «gane», de modo que será bueno doblar las piernas para absorber el impacto del aterrizaje y de este modo lograr mantener el equilibrio.