Cómo hacer un deshumidificador casero
Si tienes el ambiente descompensado en algunas partes de la casa, y notas algo de humedad, quizás te venga bien un deshumificador entre los que podemos encontrar muchos modelos en el mercado. Otra opción es la de intentar hacer uno con nuestras propias manos. Algo realmente sencillo si sigues todos los pasos a continuación, sobre cómo hacer un deshumidificador casero.
Con las lluvias que han caído estos últimos días, puede que más de uno en casa, haya notado como aumenta la sensación de humedad. Además en algunas estancias como el baño, la cocina o los armarios también se puede crear un ambiente más húmedo de lo normal de modo que para descompensar ese desequilibrio de temperatura y no derivar en otros problemas suelen utilizarse los llamados deshumidificadores; unos aparatos cuyo aspecto es similar al de un aire acondicionado portátil, aunque con otro objetivo.
En el mercado podemos encontrar muchos de estos deshumificadores cuyo aire hace que se filtre la humedad y desaparezca. La verdad es que son realmente efectivos, aunque no hace falta gastar dinero en ellos si tenemos en cuenta que también podemos hacer deshumificadores caseros que además de permitirnos ahorrar el comprar uno de estos aparatos, hará que no tengamos que gastar tampoco electricidad.
Si deseas poder hacer tu propio deshumidificador casero y además de manera sencilla, tenemos una idea que seguro te va a encantar y enseguida, podrás poner a prueba.
Pasos para hacer un deshumidificador casero
Una valiosa ayuda para poder hacer un deshumificador casero es la sal gruesa que en sí misma, es perfectamente capaz de absorber la humedad presente en ambientes domésticos. Además cuando se moja se puede reemplazar, se deja secar y luego se reutiliza en tu propio deshumidificador doméstico.
Veamos cómo hacer un deshumidificador casero con sal y una botella
- Comienza cogiendo una botella de plástico vacía que debes lavar bien.
- Una vez lavada, vas a cortar la botella en tres partes y dejas que se seque antes de poder utilizarla.
- Una vez se haya secado coge la base de la botella y dentro de estas colocas la parte de arriba que hayas cortado, la que tiene el cuello y la boquilla. Del revés, de modo que te quede como un recipiente.
- Ahora coge 150 gramos de sal (suficientes para enfriar una habitación del tamaño de 5 metros por 5) y los colocas dentro del calcetín.
- Haz un nudo, y corta el sobrante del calcetín.
- A continuación coloca el calcetín con la sal dentro de la base-recipiente que hemos creado con la la botella.
¡Listo! ya tienes tu propio deshumidificador casero que debes colocar en la estancia en la que creas que hay mucha humedad acumulada.
Consejos
- Durante la ducha o el baño será bueno que lo hagas con un ventilador.
- En la cocina, la humedad se puede limitar al encender la campana estractora, especialmente cuando se han colocado ollas que emiten mucha vapor.
- Si la temperatura exterior lo permite, es aconsejable abrir ligeramente las ventanas durante la cocción, o al final de la preparación de los platos, a fin de facilitar el secado de la humedad formada debido a la condensación del vapor .
- La misma regla es válida al final de la ducha o baño.
- Ventila tu casa, especialmente en días soleados y con baja humedad externa, es la primera regla para limitar la formación de humedad y moho.