¿Qué fue de los hermanos Menéndez y cuál es el aspecto actual de Erik y Lyle?
Siguen cumpliendo condena
El pasado 19 de septiembre, Netflix consiguió volver a dejar sin palabras a todos y cada uno de sus suscriptores con el estreno de una nueva ficción true crime, que lleva por título Monstruos: la historia de Lyle y Erik Menéndez. Las expectativas eran altas y, una vez más, no han decepcionado. En esta ocasión, estamos ante una serie que se ha basado en un caso real puesto que, el 20 de agosto de 1989, los hermanos Menéndez acabaron con la vida de sus padres, José y Kitty Menéndez, en su mansión ubicada en Beverly Hills. Durante años, este parricidio ha dado mucho de qué hablar. Ahora, tras el estreno de este proyecto en Netflix, muchos son los que han recordado numerosos detalles de esta historia, mientras que otros tantos la han descubierto. Sea como sea, es un hecho que esta serie no está dejando absolutamente indiferente a nadie, ni mucho menos.
Como no podía ser de otra manera, Monstruos: la historia de Lyle y Erik Menéndez ha conseguido alcanzar el número 1 en cuanto a serie más vista de la plataforma. Y así lleva desde hace semanas. Es más que evidente que sus creadores Ryan Murphy e Ian Bennan, que también están detrás de Monstruo: la historia de Jeffrey Dahmer, han hecho un trabajo excepcional. Pero también lo han hecho todos y cada uno de los actores que han formado parte de este proyecto, sobre todo sus protagonistas, a los que dieron vida a los cuatro integrantes de la familia Menéndez: Nicholas Alexander Chavez (Lyle), Cooper Koch (Erik), Javier Bardem (José) y Chloë Sevigny (Kitty). Si no has visto el final de esta serie que está arrasando en la plataforma Netflix, cuidado porque a continuación podrás encontrarte con varios SPOILERS con los que podrías descubrir gran parte de la historia de los hermanos Menéndez.
Para comenzar, debemos tener en cuenta que en Monstruos: la historia de Lyle y Erik Menéndez podemos ver qué ocurrió en este mediático caso desde varias perspectivas. Entre ellas, como no podía ser de otra forma, también desde el punto de vista de los asesinos de José y Kitty. Tal es el interés que ha generado esta serie de Netflix que muchos son los espectadores que quieren saber algo más de lo que ocurrió en realidad con Erik y Lyle y, sobre todo, cuál es su aspecto ahora.
¿Qué fue de los hermanos Menéndez?
Es importante tener en cuenta que ambos venían de una familia adinerada de origen cubano. En 1989 llegó el gran punto de inflexión de sus vidas, cuando acabaron con la vida de sus padres en su casa en Beverly Hills. Meses después fueron detenidos, pero no fue hasta 1996, tras la celebración de un segundo juicio, cuando Erik y Lyle fueron condenados a cadena perpetua por asesinato con premeditación. Y no solamente eso, sino que les negó la posibilidad de obtener la condicional.
Ellos trataron de justificar su asesinato por miedo, ya que durante años habrían sufrido todo tipo de abusos por parte de sus padres pero la justicia, en cambio, llegó a otra conclusión. Y es que ambos habían acabado con la vida de José y Kitty con un objetivo muy claro, que no era otro que heredar la fortuna de la familia.
Tras ser condenados, Lyle fue enviado a la cárcel de Mule Creek, en Ione (California) mientras que Erik, por su parte, fue trasladado a la prisión de Richard J. Donovan, ubicada en San Diego. Por lo tanto, durante muchísimos años, los hermanos Menéndez estuvieron separados con el objetivo de evitar que llevasen a cabo algún tipo de plan para escapar. A pesar de todo, estuvieron permanentemente en contacto a través de cartas.
Una de las cosas más sorprendentes de su historia es que los dos se casaron pocos años después de ser encerrados. Concretamente, Erik contrajo matrimonio con Tammi Ruth Saccoman en 1999 mientras que Lyle se casó hasta en dos ocasiones. Por un lado, con Anna Eriksson (1996 – 2001) y, por otro lado, con Rebecca Sneed en 2003.
Sobre su vida entre rejas, Erik Menéndez se pronunció en la revista People, en una entrevista concedida en 2005: «Me he metido en peleas, muchas peleas, pero nunca peleo yo primero. Tienes que aprender a ser inteligente. Hay un estado perpetuo de miedo que existe como ruido de fondo. Siempre tienes que estar atento a quién está a tu alrededor. Tienes que afinar continuamente tus instintos de supervivencia», aseguró.
A pesar de todo, en el año 2018, las autoridades trasladaron a Lyle Menéndez a la cárcel de Richard J. Donovan, es decir, la prisión en la que se encontraba su hermano. Por lo tanto, actualmente, están cumpliendo condena juntos. El propio Lyle hizo unas declaraciones a DailyMail en las que se sinceró sobre cómo fue reencontrarse con su hermano casi 30 años después: «Fue un momento extraordinario para mí y para toda mi familia, que tuvo que visitarnos en prisiones separadas en dos partes del estado. Me eché a llorar». Y añadió: «Cuando lo trajeron en una camioneta, pude verlo bajar y reunirme con él, y no estaba seguro de cómo reaccionaría. Sentí mucha adrenalina y, simplemente, terminé rompiendo a llorar, lo cual es un momento bastante emotivo».