Lío en la Eurocopa: la UEFA investiga cánticos racistas de la afición de Serbia a jugadores ingleses

Primer escándalo racista en la Eurocopa de Alemania. La UEFA investiga supuestos cánticos racistas entonados por aficionados serbios en el encuentro del pasado domingo entre su selección, Serbia, e Inglaterra, partido que se jugó en Gelsenkirchen. Según varias denuncias llegadas a la propia UEFA, algunos jugadores ingleses recibieron insultos racistas durante el partido.

Este encuentro jugado el domingo, correspondiente a la primera jornada del grupo C y que ganó Inglaterra por 0-1, vino marcado por incidentes entre ultras de los dos países. Hubo dos heridos en el centro de esta ciudad alemana, una de las 10 sedes de la Eurocopa, y además se había declarado de alto riesgo el partido al tratarse de dos selecciones con ultras de lo más violentos.

Sin embargo, ya dentro del estadio sede de la Eurocopa, también hubo estos incidentes racistas, según denuncias de aficionados que estuvieron en el campo y que investiga la UEFA a Serbia. Eso sí, no consta ninguna queja desde la delegación inglesa, que no ha hecho comunicado ni denuncia alguna sobre estos supuestos cánticos racistas. La UEFA confirmó que un inspector de ética y disciplina llevaría a cabo una investigación sobre el «presunto comportamiento discriminatorio» de los aficionados serbios, que se espera que dure varias semanas.

El encuentro se desarrolló sin apenas incidente dentro del estadio y el partido de fútbol se jugó sin problemas, sin que tampoco el árbitro parara el encuentro al escuchar estos supuestos cánticos racistas que ahora estudia la UEFA. Inglaterra se llevó la victoria con un solitario gol de Bellingham. Lejos de ser ese equipo que apuntaba a deslumbrar con su juego, los de Southgate terminaron defendiéndose con uñas y dientes ante una Serbia que pudo empatar en el tramo final, pero a la que le faltó claridad en los metros finales. Pickford acabó sosteniendo el botín logrado por el atacante del conjunto blanco, para darle a los ingleses sus tres primeros puntos en un campeonato continental que aspiran a llevarse por primera vez.

El historial de Serbia

A los ultras serbios se les vigila muy de cerca desde el máximo organismo del fútbol europeo. La federación de Kosovo -que no juega esta Eurocopa, pero está presente a nivel sociopolítico- se había quejado anteriormente a la UEFA por las banderas, cánticos y pancartas serbias en el partido que, según afirmó, contenían «mensajes políticos, chovinistas y racistas contra Kosovo». Cabe recordar que Kosovo es un territorio que en la práctica funciona como independiente, pero que no es reconocido por muchos países, entre ellos España, y menos Serbia, que la considera una provincia autónoma dentro de su territorio.

Serbia también ha sido acusada formalmente de dos cargos, por exhibir sus seguidores una pancarta que «transmitía un mensaje provocador impropio de un acontecimiento deportivo», y por lanzar objetos al interior del estadio. En noviembre, Serbia fue castigada con jugar su partido de clasificación para la Eurocopa 2024 contra Bulgaria en un estadio parcialmente cerrado, después de que los insultos racistas empañaran su victoria sobre Montenegro.

El siguiente partido de Serbia en la Eurocopa será el próximo jueves, 20 de junio, ante Eslovenia en Múnich. Se espera que vuelvan a viajar miles de serbios a la ciudad alemana, en la que se jugó el primer encuentro del torneo.