Torra y Aragonès se reúnen este jueves para abordar el acuerdo de investidura de Pedro Sánchez
El presidente de la Generalitat, Quim Torra, se reunirá mañana jueves con el vicepresidente catalán y coordinador nacional de ERC, Pere Aragonès, con el fin de debatir el acuerdo de los republicanos han alcanzado con el PSOE para facilitar la investidura de Pedro Sánchez.
La formación de Quim Torra, Junts per Catalunya (JxCat) afirma que no se siente «vinculada» a ese pacto al considerarlo desleal. Fuentes de Presidencia de la Generalitat han confirmado a Efe que el encuentro se celebrará de forma «discreta» en el Palau de la Generalitat.
La cita tendrá lugar el mismo día que ERC celebrará su consejo nacional para decidir si finalmente avala el acuerdo con el PSOE para facilitar, con la abstención, la investidura de Pedro Sánchez como presidente del Gobierno.
El acuerdo sellado por los negociadores de ERC y PSOE para la investidura de Sánchez recoge que los acuerdos que salgan de la mesa de negociación entre el Gobierno y la Generalitat se someterán a una consulta para que la ciudadanía de Cataluña los avale o rechace.
JxCat, socio de gobierno de los republicanos en Cataluña, ya ha avisado de que «no se siente vinculado» con este acuerdo y ha sugerido que es desleal que los republicanos impliquen al Govern sin consultar a sus socios.
«Hemos conocido este acuerdo que se nos anuncia cuando ya está cerrado, quizás lo hemos conocido incluso más tarde que los dos grupos que están en la oposición del gobierno de Cataluña. No me parece ni una muestra de lealtad ni de respeto, ni hacia el Govern ni hacia el presidente de la Generalitat», dijo el martes la portavoz de JxCat en el Congreso, Laura Borràs, en rueda de prensa.
Este es el mensaje que quiere trasladar el president Quim Torra al vicepresidente Aragonès en la reunión de mañana: que lo que ERC pacte con el PSOE no tiene que implicar al Ejecutivo catalán, ya que los socialistas han mantenido a JxCat al margen de la negociación.
La portavoz de JxCat dejó claro ayer que la mesa de «diálogo» que han pactado republicanos y socialistas no puede ser aceptada de primeras como un mecanismo válido para resolver el conflicto catalán, ya que no se ha implicado a «todos los actores» del independentismo en su diseño.