El PSOE maniobra en el Congreso para tener más tiempo para pactar la Ley de Amnistía con Junts

El Partido Socialista ha solicitado a la Mesa del Congreso -en la que cuenta con mayoría con Sumar- una ampliación del plazo para ultimar el dictamen sobre la Ley de Amnistía, que habrá de someterse después a la votación del Pleno. Los socialistas disponían hasta el próximo 21 de febrero de plazo máximo para alcanzar algún acuerdo con Junts. Sin embargo, la petición revela las dificultades de la negociación con el partido de Carles Puigdemont, que mantiene como condición la inclusión total de los delitos de terrorismo.

Así, el Grupo Parlamentario Socialista remitió este sábado un escrito a la Mesa del Congreso en el que solicita la «ampliación del plazo para la emisión del dictamen» sobre la Ley de Amnistía.

La negociación entre el PSOE y Junts sigue en marcha, aunque aún sin acuerdo perfilado. La principal discrepancia reside en el terrorismo. El partido de Carles Puigdemont exige suprimir cualquier alusión al delito, a lo que los socialistas se resisten.

Cabe recordar que la última versión de la ley -que Junts rechazó en la votación en el Congreso- permite que la amnistía se aplique a los condenados por terrorismo, haya o no sentencia firme. Únicamente se excluyen aquellos hechos que «de forma manifiesta y con intención directa, hayan causado violaciones graves de derechos humanos, en particular, las previstas en el artículo 2 y 3 del Convenio Europeo para la Protección de los Derechos Humanos y de las Libertades Fundamentales, y en el derecho internacional humanitario». En concreto, esos artículos se refieren a los casos en que se produzcan muertes y torturas. 

Con este cambio se pretende blindar a los 12 miembros de los autodenominados Comités de Defensa de la República (CDR) y a los 12 procesados por los altercados violentos promovidos por Tsunami.

Sin embargo, en Junts consideran que no ofrece la suficiente protección y rechazan además que la ley mencione el terrorismo al estimar que ese delito no tuvo lugar durante el proceso separatista catalán. Por este motivo, reclaman el borrado total del término de la futura norma. El partido ya ha trasladado la advertencia a los de Sánchez: «Si el PSOE piensa que aprobaremos la misma amnistía que tumbamos hace 20 días, va dado», se expresan, contundentes, desde la formación separatista, como publicó este periódico.

En los días transcurridos desde la votación fallida en el Congreso las distintas partes negociadoras han ofrecido varias alternativas, como hizo Moncloa con una reforma de la Ley de Enjuiciamiento Criminal para acortar los plazos de las instrucciones. Esta propuesta, en cualquier caso, es rechazada por Junts, al igual que un posible cambio del Código Penal para modificar el delito de terrorismo, de forma que los hechos cometidos por Tsunami se consideren una mera «desobediencia civil».

El ministro de la Presidencia, Félix Bolaños, afirmó además esta semana que la ley «cubrirá a todas las personas que estuvieron involucradas en el proceso independentista», incluso si están acusados de terrorismo porque, en su opinión, este delito no se cometió. El consejero de Derechos Sociales de la Generalitat, Carles Campuzano, ha deslizado también que Sánchez planea indultar a aquellos separatistas que puedan quedar fuera del ámbito de aplicación de la ley.

Los separatistas no quieren aprobar una Ley de Amnistía cuyo redactado no cumple sus exigencias y que requiere de otros requiebros y recovecos para lograr sus objetivos. De ahí que están enviando un mensaje nítido a Pedro Sánchez: para aprobar una ley, el texto tiene que evolucionar. En ningún caso van a votar a favor de la misma ley que tumbaron hace ahora poco más dos semanas. En Junts, además, sospechan que los socialistas volverán a dejar fuera sus últimas propuestas sobre las enmiendas que afectan a los delitos de terrorismo.

Actualmente, la ley se encuentra en la Comisión de Justicia, donde se trabaja sobre el dictamen que tumbó el Pleno del Congreso. Los partidos no pueden presentar nuevas enmiendas, por tanto sólo se pueden modificar aquellas que quedaron «vivas».  Entre ellas, la de Junts sobre la inclusión total del terrorismo.

«Nuevas cesiones»

«El PSOE pide tiempo para seguir digiriendo las exigencias de sus socios independentistas. Había dos opciones: que Junts cediera o que Sánchez tragara. Parece evidente que el aplazamiento que solicitan es para avanzar en lo segundo», señalan desde Génova, donde denuncian que «el PSOE prepara el terreno para someter a los españoles a nuevas cesiones».

«La Presidencia de Sánchez se basa en decir sí a todo lo que pidan sus socios. Por eso ya dicen que, en el ámbito del independentismo, habrá dos tipos de delincuentes: los amnistiados y los indultados. Nadie quedará fuera de la generosidad interesada de un presidente débil», advierten.

Fuentes de la cúpula popular denuncian que «la indignidad del PSOE les lleva a decir sí donde cualquier partido constitucionalista diría que no». «Por eso, pese a que insistan en que todos somos iguales, sólo Sánchez aceptaría ser presidente de esta manera. Los mismos que buscaban un procedimiento de urgencia y acortar plazos, aunque fuera de manera irregular, ahora piden prórrogas», concluyen.