Mercamadrid contrata un despacho de arquitectos para resolver la chapuza de la planta ilegal de residuos
La empresa municipal Mercamadrid ha contratado por 80.000 euros a un despacho de arquitectos para intentar resolver la chapuza de la planta de tratamiento de residuos que lleva dos años funcionando sin licencias.
El anterior equipo de gobierno de la alcaldesa Manuela Carmena inauguró en el verano de 2017 la nueva «ecoárea» de Mermadrid: una nave equipada con cintas para seleccionar los residuos que genera el mercado de abastos, y rodeada de montañas de basura que fermenta al aire libre durante varios días.
El consejo de administración de la empresa pública, presidido entonces por la edil podemita Marta Higueras, había adjudicado el 14 de octubre de 2016 a la empresa Cespa la gestión de este servicio por 1.077.566 euros anuales, con una duración de cuatro años (prorrogables por uno más). Sin embargo, el Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil comprobó el pasado mes de julio que la planta de residuos de Mercamadrid lleva dos años funcionando irregularmente, sin licencias.
Como ha informado OKDIARIO, el Ayuntamiento de Madrid no ha podido conceder la preceptiva Licencia de Actividad porque el proyecto incumple el planeamiento urbanístico de la zona: en concreto, la obligación de soterrar 123 plazas de aparcamiento en la parcela H4 en la que se ubica la «ecoárea».
Cambiar el planeamiento urbano
Con el fin de intentar resolver esta situación ilegal, el consejo de Mercamadrid convocó en febrero de 2017 un concurso para contratar un servicio externo de arquitectura y consultoría, con el fin de modificar todo el ordenamiento urbanístico de la zona.
El contrato fue adjudicado dos meses después por 79.799 euros a una UTE formada por los arquitectos Rafael Hernando de la Cuerda, Ana Rodríguez García y el despacho Rueda y Vega Asociados.
Entre los cometidos que el director general de Mercamadrid, David Chica, ha encargado a estos arquitectos está la reordenación de las zonas de aparcamiento en todo el recinto de la empresa municipal, situado en el distrito de Vallecas. Y en concreto, esta UTE deberá diseñar una modificación del planeamiento urbanístico de la zona para eliminar la obligación de soterrar más de un centenar de plazas de aparcamiento en la parcela H4 en la que se ubica la «ecoárea».
Según las fuentes consultadas por OKDIARIO, durante estos dos años la Concejalía de Urbanismo del Ayuntamiento ha rechazado hasta ahora, por inviables, todas las soluciones técnicas que Mercamadrid ha puesto sobre la mesa para cumplir este objetivo.
Se precisa el acuerdo de PP, C’s y Vox
Las 123 plazas de aparcamiento subterráneo previstas en la parcela H4 no pueden, simplemente, eliminarse, ya que responden a un cálculo de las necesidades de tráfico rodado de Mercamadrid. En todo caso, podrían trasladarse a otra parcela del mercado de abastos, pero el recinto de la empresa municipal está completamente saturado y no hay capacidad para ello.
La solución implicará, en cualquier caso, modificar el planeamiento urbanístico de Madrid con un largo proceso administrativo que culmina con la aprobación en el Pleno. Algo que precisará, al menos, el acuerdo de los tres partidos que forman el pacto de gobierno de Madrid (PP, Ciudadanos y Vox) para resolver la situación ilegal creada por el anterior equipo de Ahora Madrid.
A la espera de dar con la solución definitiva, la planta de residuos creada por el gobierno municipal de la alcaldesa Manuela Carmena sigue funcionando irregularmente, sin las licencias que exige la Ley. La Guardia Civil ha trasladado el expediente al Ayuntamiento para que sea éste el que imponga las preceptivas sanciones a la empresa concesionaria del servicio, Cespa.
La Concejalía de Economía que actualmente dirige Miguel Ángel Redondo (C’s) –quien el próximo mes de septiembre asumirá la presidencia de Mercamadrid– sostiene que pese a todo ello no hay ningún motivo para paralizar la actividad de la planta de residuos. Por sus instalaciones pasan cerca de 22.000 toneladas de basura al año, como paso previo a su traslado al vertedero de Valdemingómez (Madrid).
El concejal de Ciudadanos ha reafirmado en el cargo de director general de Mercamadrid a David Chica (ex secretario de Movimientos Sociales de Izquierda Unida), pese a que fue su equipo designado por Podemos el que aprobó el proyecto de «ecoárea» que vulnera el planeamiento urbanístico de la ciudad.