Los izquierdistas del CGPJ quieren una mujer presidenta mientras rechazan a tres candidatas
Los 10 vocales afines al Gobierno quieren a Pilar Teso a toda costa y descartan a otras 3 candidatas que gustan al otro bloque
El sector izquierdista del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) quiere imponer una mujer como presidenta pero rechaza a tres candidatas mujeres: Esperanza Córdoba, Carmen Lamela y Ángeles Huet. Tal como explican fuentes jurídicas a OKDIARIO, los 10 vocales afines al Gobierno sólo aceptan a Pilar Teso como presidenta del órgano de gobierno de los jueces y del Tribunal Supremo. Sin embargo, los vocales del bloque opuesto se muestran flexibles. Alguno apostaba inicialmente por un perfil diferente como el de Antonio del Moral. Sin embargo, en un esfuerzo de generosidad en pro del consenso pusieron también sobre la mesa los nombres de Pablo Lucas –el presidente de la Sala Tercera, juez del CNI y que tiene un currículum extenso y notable–, Carmen Lamela y Esperanza Córdoba. Pero ante estas propuestas se topan con «un muro»: ningún otro nombre que no sea el de Pilar Teso.
El bloque de izquierdas inicialmente habló de Pilar Teso y Ángeles Huet. Sin embargo, a la postre han concentrado todos sus votos en la primera. En un momento dado, varias vocales del nuevo CGPJ (Lucía Avilés, Argelia Queralt e Inés Herrero) del sector próximo al PSOE y Sumar hicieron un sentido alegato a favor de nombrar a una mujer y, con eso, provocar la ruptura de uno de los «techos de cristal» que quedan en España.
En ese contexto, los otros 10 vocales pensaron que Carmen Lamela, Esperanza Córdoba o Ángeles Huet podrían tener el visto bueno de todos. Sin embargo, «la cerrazón» se ha impuesto, según indican fuentes de ese sector. «Pensábamos de verdad que esas palabras iban a favor de una candidata del gusto transversal. Pero no ha sido así. Si nada cambia la votación del lunes fracasará y nos tendremos que volver a reunir ya en septiembre», resumen.
«Importa el currículum»
«No hay razones para descartar a alguna de esas mujeres o a Pablo Lucas. No tienen ningún argumento sólido. Quieren dar la impresión de que hay un nuevo bloqueo en el CGPJ, pero lo que hay es una imposición que no vamos a aceptar», agregan. En este contexto, recuerdan que el controvertido presidente del Tribunal Constitucional, Cándido Conde-Pumpido, como ha desvelado OKDIARIO, se ha posicionado a favor de Teso. Este extremo dispara las suspicacias de que Teso tiene apoyos por su ideología y no por su gran valía profesional. «No tenemos que ver si es de un color o de otro, lo que tiene que importar es el currículum y en eso gana indiscutiblemente Pablo Lucas», remarcan en referencia al magistrado que preside la Sala del Supremo donde trabaja Teso, la de los asuntos que afectan a las resoluciones del Gobierno de España.
Cabe recordar que esta sala ha protagonizado varios sonados varapalos. Entre otros, la suspensión de nombramientos como el de Magdalena Valerio como presidenta del Consejo de Estado o de puestos clave en la Fiscalía General del Estado. En ese punto, Teso se descolgó con un voto particular discrepante en el que se inclinaba por no tumbar la designación de Eduardo Esteban como fiscal de sala de menores o de Dolores Delgado como fiscal de lo militar y de memoria democrática.
«No sabemos qué problema tienen con Pablo Lucas. Es la excelencia personificada», remarcan las fuentes mencionadas. Este magistrado, licenciado en Derecho por la Universidad de Deusto y doctor por la Universidad de Bolonia, acumula quince años de ejercicio en el Supremo y asumió la presidencia en funciones de Sala el 31 de diciembre de 2022. Es miembro electivo de la Sala de Gobierno desde noviembre de 2013, lo que le otorga una experiencia de gestión que le sitúa por delante de otros candidatos. Además, en 2009 fue designado por el CGPJ magistrado encargado del control judicial previo del CNI, cargo en el que fue confirmado en 2014 y en 2019. Son unas funciones de una delicadeza extrema al tener relación con los secretos del Estado y la inteligencia nacional que ha desempeñado tres lustros sin grandes sobresaltos.
Por su parte, Victoria Rosell, ex candidata de Podemos a vocal del CGPJ, ha mostrado su disgusto con que no se prime a las mujeres. «Lo que llaman coartada feminista es derecho vigente en España. ¿La renovación era esto? El bloqueo es antidemocrático y antijurídico. Si exigimos respeto al Poder Judicial, ¡respeten las normas!», exclama. «Recordatorio amistoso al bloque conservador del CGPJ de que en nuestro Derecho el principio de igualdad incluye medidas que ofrezcan ventajas concretas en favor del sexo menos representado, según la Carta de Derechos Fundamentales de la UE», agrega para lamentar que «el bloque progresista» renuncie a «Ana Ferrer por ser de Jueces y Juezas para la Democracia». Este lunes se volverá a hacer un nuevo intento con los siete candidatos de nuevo en liza, sin muchas esperanzas de éxito.