Errejón frena a los testigos del acoso sexual de Soto para que no denuncien
El grupo municipal de Más Madrid en el Ayuntamiento de la capital está frenando la denuncia ante la Justicia por el presunto caso de acoso sexual del concejal Pablo Soto. El partido dispone de un informe «muy concluyente» elaborado por una experta en el que se recoge la versión de los testigos. Un texto que podrían elevar a las autoridades judiciales, pero que por ahora han guardado en un cajón.
Los testigos podrían acudir a los jueces, pero, en cambio, desde Más Madrid aseguran que la decisión de denunciar corresponde únicamente a la supuesta víctima.
La co-portavoz del grupo, Rita Maestre, indicó este miércoles a los medios de comunicación que, por ahora, no les consta que haya una denuncia en los juzgados. De hecho, la concejal está verbalizando de forma insistente que acudir o no a los tribunales es «una decisión que sólo le compete a la víctima».
Sin embargo, tal como ha podido confirmar OKDIARIO, cualquier persona que tenga conocimiento de los hechos puede denunciar ante la Policía o ante los tribunales de justicia. De hecho, entre el 4% y el 5% de las denuncias de acoso y violencia machista corresponden a familiares, vecinos y otros allegados que no son directamente las víctimas. En todo caso, si se abriese juicio, la víctima sí tendría que confirmar los hechos denunciados.
Maestre insiste en que, como grupo municipal, únicamente pueden incidir en las responsabilidades políticas, que es lo que han hecho exigiendo la dimisión. «Ya hemos sido bastante contundentes», comentan a este periódico fuentes del entorno de la portavoz.
De esta forma, Más Madrid incumple la máxima de las campañas de sensibilización en esta materia, según las cuales cuando se aprecia algún indicio de hecho delictivo se debe acudir al teléfono 016 y a la Policía.
Informe independiente
«El compromiso con el feminismo y con la lucha contra las violencias machistas se tiene que demostrar con hechos y no sólo con palabras», indicó Maestre. En su opinión, Más Madrid ha actuado «de forma garantista pero eficaz poniendo en el centro la protección de la víctima, que es una persona en la que tenemos que pensar todos, además de garantizar que en la organización no se dan comportamientos de este tipo».
A raíz de la protección a la víctima, Más Madrid no quiere aclarar en qué difiere la versión de Pablo Soto en su carta de renuncia y lo descrito por la militante. No quieren explicar qué es lo que pasó supuestamente en el baño y que excedería los «comentarios de tono o contenido sexual» que confesó Soto.
Maestre, en nombre de la dirección del grupo, optó por no entrar a valorar el asunto, pero remarcó que el informe firmado por la experta concluye «que se han producido hechos graves».
La edil ha relatado como, en cuanto conocieron los hechos, pusieron en marcha un protocolo anti acoso: se contrató a una experta en violencia machista para que analizara el caso mediante conversaciones con las partes y los testigos. Más tarde se establecieron recomendaciones y líneas de actuación.
«Ante la contundencia de los hechos allí descritos procedimos a pedir la dimisión inmediata del concejal implicado porque entendemos que es incompatible con ser un cargo público de una organización como Más Madrid», dijo Maestre el miércoles, flanqueada por Marta Higueras, número uno del grupo municipal.
Soto publicó en su cuenta en Twitter una versión de los hechos que no coincide con la víctima. Se justifica en que el alcohol le sienta mal y no recuerda lo sucedido. Ante esto, Más Madrid insiste en que cumpla su palabra y entregue finalmente su acta de edil. Por último, sobre una hipotética expulsión de Más Madrid, Maestre comentó que «es un proceso que hay que ir hablando».