El hermano de Sánchez copia el relato del «fango»: «La causa no es propia de una justicia democrática»
Su defensa: "Abrir un expediente criminal por declaradas causalidades no parece propio de una administración de justicia democrática".
La defensa legal de David Sánchez Pérez-Castejón, hermano de Pedro Sánchez, emula argumentos del relato que Moncloa utiliza para defender a la esposa del presidente, Begoña Gómez. El denominado «fango», la utilización «antidemocrática» de la justicia para llevar adelante causas con objetivos políticos, se ha convertido en la respuesta del PSOE ante cualquier avance de la investigación contra Gómez. Y el hermano del presidente del Gobierno se sube al carro del fango con escritos de defensa en los que cuestiona los métodos «democráticos» de la juez y los agentes que le investigan.
La defensa del hermano de Sánchez considera que está bajo una investigación prospectiva, que no ha acotado concretamente los hechos de los que se le acusa e insinúa que hay cierto toque político en la instrucción que le lleva a determinar que «abrir un expediente criminal por declaradas causalidades no parece propio de una administración de justicia democrática».
Así figura textualmente en un escrito enviado por el letrado de la defensa a la juez del Juzgado de Instrucción nº3 de Badajoz que lleva el caso de presunta corrupción de David Azagra, el nombre artístico del hermano de Sánchez. De esa forma, la defensa del hermano del presidente se suma a ese relato del lawfare o «la máquina del fango» de la que habló Sánchez en aquella carta de mayo en la que amagó en falso con dimitir. La estrategia que ha formado el relato bajo el que el PSOE, en bloque, defiende a Begoña Gómez en su causa.
Además de la juez de instrucción, la defensa de David Sánchez Pérez-Castejón alude también directamente al «comandante de la Unidad», en referencia al oficial que se encuentra al frente del equipo de la Unidad Central Operativa (UCO) que actúa como Policía Judicial en la investigación. A él le responsabiliza de haber escrito un informe en que se utilizan «verbos en conjugación condicional», poniendo como ejemplo frases como «habría [sic] tenido lugar una serie de actos preparatorios, o existirían diferentes comunicaciones entre ellos».
La defensa de Begoña
Argumentos parecidos ha utilizado esta semana la defensa de Begoña Gómez, mujer del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, para recurrir la citación del jefe del Ejecutivo ante el juez como testigo. Han acusado al magistrado que instruye el caso, Juan Carlos Peinado, de que «no existen indicios más que la voluntad libérrima del juez» para llamarlo a comparecer. El juez investiga a la esposa del líder socialista por un presunto delito de tráfico de influencias y corrupción en los negocios.
Antonio Camacho, abogado de Begoña Gómez, ha ahondado en su escrito que la providencia con la que el juez cita a declarar al presidente «carece de sentido». A ojos del letrado, para que haya una «adopción de medidas de investigación» tiene que existir un «fundamento» que, entiende, «no existe en absoluto» actualmente. Y lo argumenta en que el razonamiento por el que se cita a Sánchez «no se ha exteriorizado en la providencia» que se dictó el pasado 19 de julio y que se conoció este pasado lunes.
La defensa de Begoña Gómez insiste en la «inexistencia de objeto» de la causa que el juez Peinado instruye contra ella. El abogado de la esposa del líder socialista razona que los hechos por los que se está instruyendo el caso contra Begoña Gómez «fueron avocados a favor de la Fiscalía Europea». Por tanto, Camacho considera que el juez ya no puede seguir investigándola.
Mientras, el propio PSOE ha pasado esta semana al ataque contra el juez del caso Begoña Gómez, Juan Carlos Peinado. El portavoz socialista en el Congreso, Patxi López, le ha acusado de prevaricación y de querer «cargarse» al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, después de que este lunes se conociera que el magistrado ha citado al líder socialista como testigo en la causa en la que investiga a su mujer, Begoña Gómez, por presuntos delitos de corrupción en los negocios y tráfico de influencias.
«Alguien se quiere cargar a Pedro Sánchez, ya que no lo ha conseguido por las urnas y no lo ha conseguido por otras iniciativas», ha sentenciado el político del PSOE. Y ha subrayado que llega a la «conclusión» de que «es una operación política».