Hasta el líder del PSOE en Madrid se subleva contra el Gobierno: «Hora de comer y un buen vino, no falla»
La nueva estrategia del Ministerio de Sanidad para prevenir enfermedades cardiovasculares ha provocado la polémica por la medida que promueve excluir el alcohol de los menús de bares y restaurantes. La propuesta no ha gustado ni siquiera a los propios socialistas. El líder del PSOE en la Comunidad de Madrid, Juan Lobato, ha respondido a través de las redes sociales con una simbólica fotografía en la que él mismo disfruta de una copa de vino: «Hora de comer y buen vino. No falla», ha escrito unas horas después de conocerse el plan del Gobierno.
En concreto, Sanidad propone colaborar con establecimientos de restauración «para promover la dieta mediterránea como modelo de alimentación cardiosaludable, sin incluir en ella el consumo de alcohol». En ningún caso se habla de prohibición aunque las medidas, obviamente, van encaminadas al fin del consumo. Serán las comunidades autónomas las encargadas de su desarrollo.
Lobato ha asistido precisamente este miércoles a un encuentro con empresarios y asociaciones del sector agropecuario, donde ha ensalzado «lo que nos une y nos da valor: nuestros productos, que son de máxima calidad». Entre ellos, ha destacado el vermú de Fuenlabrada o cervezas y vinos de Madrid.
Crítica de Ayuso
También la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, se ha hecho eco de la polémica: «Un buen vino como el que los señores del Gobierno nos quieren prohibir», ha escrito la dirigente madrileña en su red social, acompañando el mensaje con una fotografía de la que se deduce que ella misma está disfrutando de una copa.
Entre otras medidas, Sanidad regulará también «la obligación de los restaurantes de ofrecer agua del grifo por defecto en los menús», así como la «presencia y contenido de alimentos y bebidas en las cafeterías y máquinas expendedoras de las instituciones de la administración pública y todos los centros educativos, públicos o privados, de forma que mayoritariamente se oferten productos saludables y bebidas libres de alcohol».
El Gobierno estudiará además una nueva fiscalidad para fomentar lo que considera una «alimentación saludable» y promoverá «los hogares libres de humo», es decir, que no se fume en los domicilios particulares.