Ceuta y Melilla

El Gobierno descarta reforzar a la Guardia Civil en Ceuta: «Lo impiden las circunstancias actuales»

Ceuta Guardia Civil
Un guardia civil frente al espigón de El Tarajal, en Ceuta
Pelayo Barro

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, volvió de Rabat sin un compromiso claro ni explícito por parte de Mohamed VI sobre la integridad territorial de Ceuta y Melilla; justo en los días previos a su visita oficial a Marruecos, el Ejecutivo descartó un refuerzo de agentes de la Guardia Civil para ambas ciudades, alegando que «las circunstancias actuales lo impiden» y sin dar más detalles. La Guardia Civil lleva años reclamando la creación en Ceuta y Melilla de una unidad estable, ya que buena parte de los agentes van y vienen desde otras provincias en rotaciones cada quince días.

Por tanto, Ceuta y Melilla no tendrán esta legislatura el refuerzo de agentes de la Guardia Civil que vienen reclamando desde hace tiempo los propios agentes, que consideran que su despliegue en las ciudades autónomas es insuficiente. Máxime, tras los sucesos ocurridos en mayo de 2021, con el asalto masivo de más de 10.000 personas a la valla de Ceuta, que obligó incluso a desplegar a la Legión con vehículos blindados en la playa de El Tarajal. Un asalto que además Interior nunca llegó a incluir en sus estadísticas oficiales sobre inmigración.

El Gobierno rechaza así un plan propuesto de forma interna (a propuesta de la Asociación Española de Guardias Civiles) en la propia Dirección General de la Guardia Civil para crear una Unidad de Seguridad Ciudadana de Comandancia (Usecic), un cuerpo estable que pueda hacer frente a problemas de seguridad y a la delincuencia, especialmente, aquella que se ceba con el ciudadano.

El Ejecutivo descartaba este plan por escrito, en una respuesta a Vox en el Congreso de los Diputados que lleva fecha del 28 de marzo. Apenas una semana antes del viaje de Sánchez a Rabat y dos semanas después de la carta enviada a Mohamed VI en la que España, tras un giro a 47 años de postura, renunciaba a un referéndum para el Sáhara y se plegaba a las tesis marroquíes de autonomía para la ex colonia.

El argumento que esgrimió el Gobierno a apenas unos días de su cita con Mohamed VI dice, textualmente, que en «las actuales circunstancias que se producen en Ceuta y Melilla» impiden acometer el plan para renunciar a esos refuerzos puntuales y quincenales y convertirlos en estables.

«En relación con las preguntas formuladas y en lo referente a los traslados quincenales de Guardias Civiles a la Ciudad Autónoma de Ceuta, se informa que consisten en refuerzos procedentes de unidades, principalmente pertenecientes a la Agrupación de Reserva y Seguridad, que son desplegados en Ceuta al objeto de incrementar los recursos destinados a la protección del perímetro fronterizo», explicaba el Gobierno.

No habrá blindaje

Además, tal y como ha desvelado OKDIARIO, entre los mensajes que Sánchez llevó a Rabat se encontraba un compromiso firme por parte de España de que el refuerzo de presupuesto militar anunciado por el Gobierno tras la invasión de Ucrania no afectará al equilibrio de fuerzas en la frontera de Ceuta, Melilla ni Canarias.

Este diario se hizo eco de las muestras de intranquilidad que habían llegado a Madrid desde Marruecos después de que, apenas unos días más tarde de la carta enviada por Sánchez, Moncloa anunciase un aumento sin precedentes del gasto militar. Prácticamente doblando la inversión en defensa para aclimatar la cifra actual al 2% del PIB que exige la OTAN.

Los equipos de Moncloa y Exteriores trabajaron con ese malestar para llevar a Rabat una propuesta de amistad que no supusiera, en la práctica, el blindaje militar de Ceuta y Melilla. Calmar los ánimos de Marruecos explicando que el frente que busca reforzar España con esa inversión es el de la Europa del este.

Lo último en España

Últimas noticias