Ferraz busca una figura mediática para dar un empuje a la candidatura de Espadas en Andalucía
La dirección federal teme que la candidatura de Espadas pueda pasar de primera a tercera fuerza política
Las encuestas siguen aupando al PP en Andalucía y sitúan a Juanma Moreno al borde de la mayoría absoluta
Andalucía confirma su retraso de las elecciones hasta el final de la legislatura tras el cisma con Vox
Este año habrá elecciones en Andalucía. Serán, según ha deslizado este viernes el presidente andaluz Juanma Moreno, más pronto que tarde. Y a medida que se acerca la cita con las urnas crece el temor en Ferraz con su candidato. «No transmite, no engancha» subrayan. Desde la dirección federal buscan un nombre potente, a ser posible ajeno de la política y mediático, para ir de número dos de Juan Espadas. Para intentar salvar una candidatura que muchos ven «abocada al fracaso».
A menos de un año de la jornada electoral, que podría producirse incluso antes del verano, Juan Espadas no acaba de despegar en los sondeos. De hecho, en los internos que maneja Ferraz, no sólo no despega, sino que retrocede. Y el principal miedo, a día de hoy, es que el exalcalde de Sevilla pueda incluso quedar por detrás de Vox. Los socialistas pasarían, pues, de ser la primera a ser la tercera fuerza política en el Parlamento de Andalucía. Un varapalo sin paliativos para un partido acostumbrado a mandar sin prácticamente oposición y a dedo una comunidad que durante muchos años han manejado a su antojo.
Las encuestas que desde hace meses analizan en el cuartel general del PSOE, las propias encargadas por el partido, así como las que publican algunos medios, apuntan a que «Espadas quedará muy por detrás de Susana Díaz». Entonces pasaron de 47 a 33 escaños. Y eso puede tener también consecuencias a nivel interno. El actual secretario general de la federación andaluza es una apuesta personal de Pedro Sánchez que apostó por él para descabalgar de todo el poder a su antiguo rival en las primarias.
«Pero Díaz no se rinde tan fácil, está en el Senado, trabajando, y si tiene la oportunidad de liderar el PSOE federal puede que lo intenten» apuntan dirigentes que la conocen bien. Es decir, que un mal resultado de Juan Espadas, sumado al que obtuvieron Ángel Gabilondo y Luis Tudanca en Madrid y Castilla y León- y una eventual pérdida de La Moncloa, haría tambalear el liderazgo del presidente. Si las expectativas electorales no remontan, apuntan fuentes cercanas a Sánchez, la previsión respecto a su presencia en la campaña andaluza será como la que tenía en Castilla y León, con pocos actos. A menos que vea una posible remontada y se quiera apropiar de ella.
«No hay liderazgos alternativos»
Las voces críticas en el PSOE van en aumento. La elección de Alberto Núñez Feijóo como nuevo presidente del Partido Popular es vista como «un relanzamiento» del principal partido de la oposición. «Son caras conocidas, sí, pero tienen de donde tirar» apuntan. «¿Y nosotros?», se preguntan. Varios dirigentes critican que «no hay liderazgos alternativos al de Pedro Sánchez» porque no quiere que nadie le haga sombra». Y si pierde las elecciones y se ve abocado a dimitir «¿quién se queda?», lanzan al aire.
«¿Lastra?; ¿Cerdán?; ¿Llanos?; ¿Bolaños? No tenemos a nadie con la preparación, el conocimiento y la empatía suficiente para rivalizar con Feijóo» apuntan. Y eso, añaden, «nos puede hacer mucho daño como partido a medio plazo».