Éste es el mail a la gerente de Podemos avisándole de las irregularidades «que podrían comprometer al partido»

La abogada purgada de Podemos, Mónica Carmona, que fue expulsada del partido junto a José Manuel Calvente por investigar las irregularidades de la formación morada, envió un correo electrónico a la gerente Rocío Val alertándole de que habían «detectado graves irregularidades que podrían comprometer al partido». El email ha sido aportado a la causa por Podemos, imputado en el procedimiento, tras el requerimiento judicial del instructor Juan José Escalonilla.

El mensaje fue enviado antes de que los de Iglesias despidieran de manera fulminante a la responsable de Cumplimiento Normativo, Mónica Carmona, por investigar la presunta financiación irregular de los morados. Concretamente fue enviado el día 3 de diciembre de 2019 a las 14:50 horas. En el correo, al que ha tenido acceso OKDIARIO, la letrada manifiesta que había tenido conocimiento de que tanto su compañero Calvente como ella iban a ser despedidos.

«He tenido conocimiento de que el 2 de diciembre de 2019 el Consejo de Coordinación ha acordado cesar a don José Manuel Calvente Redondo como delegado de Protección de Datos del partido y elevar por propuesta al Consejo Ciudadano para que me sustituyan como responsable de Cumplimiento Normativa”, señala Carmona en el encabezamiento del texto. Sin embargo, la abogada explicaba que dicha medida incumplía lo dispuesto en el plan de Cumplimiento Normativo. A Podemos no le preocupó incumplir sus propias leyes para ejecutar estos despidos improcedentes, tal y como ha reconocido la propia formación ante la Justicia.

Caza de brujas

Carmona sabía cuál era el motivo real que había llevado a la dirección de Podemos a ejecutar el cese de ambos letrados. Calvente y ella se percataron de hechos presuntamente delictivos y como abogados que respetan la Ley no estaban dispuestos ocultarlo. Decidieron denunciar y esto provocó una medida injusta y arbitraria porque, según fuentes consultadas por OKDIARIO, «el delincuente no era una oveja negra del partido ni tampoco un hecho aislado, sino que se trataba del modus operandi de la formación».

«Por todos es sabido que la decisión de sustituirme como responsable de Cumplimiento Normativo y el cese camuflado bajo despido disciplinario de José Manuel Calvente no es más que una represalia por haber detectado una serie de irregularidades graves que podrían comprometer seriamente al partido como entidad jurídica desde un punto de vista penal, administrativo y reputacional. Por lo cual tanto el delegado de Protección de Datos como la responsable de Cumplimiento Normativo nos hemos visto obligados a actuar en defensa del partido», expone Carmona.

Despido improcedente

El ex coordinador jurídico de Podemos, José Manuel Calvente, fue despedido tras investigar la financiación ilegal del partido. Para justificar su despido, Pablo Iglesias se inventó un delito de acoso sexual y laboral a la abogada Marta Flor Núñez. Una falsa acusación que ha sido desmontada por dos Juzgados.

El Juzgado de lo Social número 10 de Barcelona ha condenado a Podemos a pagar al letrado una indemnización de 35.000 euros. La formación de Iglesias reconoció que el despido fue improcedente y que no existió un supuesto acoso laboral y sexual.

La Audiencia Provincial de Madrid ratificó en un auto el sobreseimiento ante el que no cabe recurso, de la causa en la que se investigaba a Calvente por la falsa acusación vertida por Iglesias y Marta Flor. Tanto la juez instructora Rosa Freire como el Ministerio Fiscal y, en última instancia, la Audiencia Provincial llegaron a una misma conclusión: no existió delito.

El auto expuso, como razonamiento fundamental, que «partiendo del relato de hechos que se realiza en el escrito de querella, que se ratificó ante la juez instructora donde, como se ha recogido, mantuvo en esencia el contenido de la misma, la declaración del querellado, los contenidos completos de las conversaciones mantenidas entre ambos vía WhatsApp y emails y demás documentos obrantes en la causa, debe compartirse, como se ha dicho, el sobreseimiento provisional acordado por la Juez a quo, al no haberse acreditado incidiariamente la comisión de ninguno de los delitos imputados».

La Audiencia llegó a esta conclusión tras analizar los mensajes completos aportados por Calvente a la causa. Porque, tal y como afirma el auto, Marta Flor aportó para justificar su querella mensajes sesgados y fuera de contexto, para intentar demostrar el falso acoso. Frente a este ardid de la querellante, el abogado purgado aportó a la causa la transcripción completa de las conversaciones mantenidas por WhatsApp, Telegram y emails con la consiguiente explicación de su verdadero significado. El objetivo era demostrar el montaje urdido por Marta Flor con la ayuda de Podemos.