Una empleada de Artyplan reconoce ante el juez que Òmnium Cultural encargó material para el 1-O
La responsable de Recursos Humanos de la empresa de artes gráficas Artyplan, Rosa María Sans, ha admitido este martes que la entidad soberanista Òmnium Cultural encargó material propagandístico --folletos y carteles-- del referéndum independentista del 1 de octubre de 2017, pero que no se emitió ningún albarán de entrega ni factura.
Según el escrito de acusación de la Fiscalía, Artyplan elaboró 400.000 dípticos, 26.000 folletos y 30.000 carteles, material que forma parte de un lote más grande de encargos a varias empresas por parte de Òmnium Cultural, tal y como consta en el sumario de la causa que investiga la organización del 1-O en el Juzgado de Instrucción número 13 de Barcelona.
De los correos electrónicos intervenidos, los investigadores concluyen que Òmnium realizó un pedido de casi 1,3 millones e carteles y trípticos publicitarios del referéndum, lo cual tendría un coste de 61.879 euros entre la impresión y la distribución. Así, el encargo constaría de un millón de trípticos de tamaño A4, 100.000 pirulos (para estructuras cilíndricas) de 70×100, 150.000 carteles para porterías de tamaño A3 y 30.000 carteles para tiendas de tamaño A4.
«Se puede afirmar que la Generalitat utilizó Ómnium para realizar los pedidos y encargar la distribución de los carteles para animar a votar el 1-O con la inscripción institucional», deduce la Guardia Civil en uno de los informes incorporados al sumario.
Sin embargo, Rosa María Sans no ha concretado si el encargo realizado a su empresa iba a ser facturado a la Generalitat, aunque tampoco se lo han preguntado. Simplemente ha dicho que el material que pidió Òmnium tenía un presupuesto de unos 17.200 euros y que no era el primer pedido de la entidad soberanista, ya que es cliente de Artyplan desde hace años.
Según ha explicado Sans a preguntas de la fiscal Consuelo Madrigal, el encargo de la entidad soberanista llegó a Artyplan a través de su departamento comercial y que el presupuesto lo fija el departamento de producción, al frente del cual está Blas Cortés. Ella ha asegurado que no conocía el pedido hasta que la Guardia Civil se personó en un almacén de la compañía para intervenirlo y que después los agentes le pidieron que les informara del precio de venta.
Tras la declaración de Sans, y antes de suspender la sesión hasta las 16.00 horas, la abogada de la ex consellera Meritxell Borrás, Judith Gené, ha recordado al tribunal que mañana está citado como testigo el ex delegado de la Generalitat ante la Unión Europea Amadeu Altafaj, a quien defiende en el Juzgado de Instrucción número 13 de Barcelona. La letrada ha puesto en su conocimiento que debido a su condición de imputado en dicha causa se va a acoger a su derecho a no declarar.
Gené, que ha apuntado que este lunes registró un escrito ante la Sala adelantando esta circunstancia, ha preguntado si es necesario que Altafaj, que vive en Bélgica, se desplace al Tribunal Supremo, ya que no va a contestar a ninguna pregunta. Por su parte, ha ofrecido comparecer por videoconferencia porque, tal y como ha subrayado Gené, no se opone a comparecer ante el tribunal.
Preguntado el Ministerio Público sobre su posición, dado que es quien solicitó esta testifical, la fiscal Consuelo Madrigal ha dicho que «asume que no venga», pero que no renuncia a su declaración, sino que es el testigo, ha precisado, el que «renuncia» a ello.
Por ello, el presidente del tribunal, Manuel Marchena, ha afirmado que la citación continúa en pie porque «lo que no se puede decir es: ‘tranquilo, no venga’». De todas formas, cabe la posibilidad de que se organice una videoconferencia para que el testigo no tenga que desplazarse hasta Madrid si no va a declarar, una solución de la que el tribunal informará con tiempo suficiente.