La declaración de la jefa de prensa de la RFEF contradice a la fiscal: «De la Fuente no participó en la reunión»
El sumario del caso recoge un escrito de Patricia Pérez donde aclaró que De La Fuente estuvo pero "no participó"
La declaración de Patricia Pérez, ex jefa de prensa de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), en 2023 arroja nueva luz sobre la controvertida reunión celebrada tras la consecución del Mundial femenino en el despacho de Luis Rubiales, entonces presidente de la Federación. El documento, que forma parte del sumario del caso consultado por OKDIARIO, revela que esta empleada aseguró que, aunque el seleccionador nacional, Luis de la Fuente, estuvo presente físicamente, «no participó» en las discusiones del comité de crisis que se desarrolló.
Patricia Pérez ratifica palabra por palabra las afirmaciones de Luis de la Fuente como testigo esta semana en la Audiencia Nacional. En su escrito firmado por ella misma afirmó que había 10 personas en el despacho noble de la Federación pero expresamente aclara: «Debo indicar que entre las personas mencionadas hay algunos que entran y salen del despacho para hablar por teléfono (como por ejemplo D. Antonio Gómez Reino, que se pasa prácticamente todo el rato fuera y solo está puntualmente dentro) y otros que no participan como D. Luis de la Fuente».
Semanas después de la polémica, Patricia Pérez afirmó que esa reunión fue anticipada el día anterior por Ana Álvarez, directora del Departamento de Fútbol Femenino, quien le indicó que debía permanecer en Madrid para «algo importante en la Federación», a pesar de tener programadas sus vacaciones tras 65 días fuera de casa por el mundial en Australia.
El documento describe con precisión la secuencia de eventos que llevaron a la reunión. La mañana del 23 de agosto, Enrique Yunta, subdirector del Departamento de Comunicación, le comunicó que debía acudir urgentemente a la Federación para declarar ante Integridad. Al llegar al edificio, descubrió que la reunión se celebraría en el despacho del presidente, un espacio que, según señala, «no había visitado» en sus «diez años de trabajo en la RFEF».
En el despacho se encontraban nueve personas: Luis Rubiales, Chema Timón (director del gabinete), Antonio Gómez Reino (director de Relaciones Institucionales), Pablo García Cuervo (director de Comunicación), Enrique Yunta (subdirector de comunicación), Javier López Vallejo (psicólogo de la Selección femenina), Luis de la Fuente, y dos personas más que fueron presentadas como «el padre de Rubiales y un amigo íntimo de su infancia».
La declaración de Pérez Requena distingue claramente entre los roles de los presentes. Mientras algunos, como Antonio Gómez Reino, «se pasa prácticamente todo el rato fuera y solo está puntualmente dentro» para atender llamadas telefónicas, otros y específicamente Luis de la Fuente se mantuvieron al margen de las discusiones que se desarrollaron durante la reunión.
Precisamente De la Fuente ha dicho lo mismo. El actual seleccionador nacional reconoce que estuvo en un «despacho colindante» mientras se desarrollaba el encuentro, e insiste en que «no participó» activamente en las conversaciones. El despacho de Rubiales se comunica por una puerta directa con el despacho anexo donde estaba el técnico riojano.
«Me dijeron que se estaba liando una gorda con el tema del beso, pero yo pasé a hablar de los temas que a mí me concernían», ha testificado De la Fuente. Asegura que su presencia en la Federación ese día respondía a asuntos estrictamente deportivos. Como todos los seleccionadores su principal preocupación es elaborar las convocatorias de jugadores.
El seleccionador admite haber visto a Patricia Pérez en las instalaciones, aunque asegura que «no crucé palabra con ella». También reconoce que había «más gente en el despacho presidencial», aunque mantiene que no fue partícipe de las conversaciones que allí se desarrollaban: «Si no hablan conmigo ni me demandan, yo no atiendo esa reunión». Patricia Pérez asegura que sufrió presiones pero, como publicó OKDIARIO, ella misma reconoció que le dejaron retocar varias veces su declaración y al final firmó «lo que quiso».
De la Fuente ha querido subrayar que ve la prensa y no era «consciente de la dimensión» que tenía la situación en ese momento. Ha defendido que es «lógico que un seleccionador nacional vaya a la federación a hablar de fútbol».
Esta intervención en el juicio ha disgustado a la fiscal Marta Durántez. La representante del Ministerio Público estudia su posible imputación por falso testimonio. La fiscal escuchará a todos los testigos y si ve mentiras en las afirmaciones de De la Fuente pedirá que se la investigue en su escrito de acusación final.
En su escrito, la entonces jefa de prensa modificó sus respuestas originales a un cuestionario previo enviado. Patricia Pérez describe cómo el presidente Rubiales solicitaba añadir detalles específicos sobre los acontecimientos del 20 de agosto, incluyendo elementos que ella asegura no haber presenciado.
La declaración revela también que el director del Departamento de Integridad, Miguel García Caba, no estuvo presente durante gran parte de la reunión, apareciendo sólo al final del proceso cuando se procedió a la firma del documento. Patricia Pérez señala que tuvo que imprimir hasta tres versiones diferentes de su declaración porque «ninguna me convencía», firmando finalmente la que «se acercaba más a mi escrito inicial».
La jefa de prensa concluye su testimonio expresando que se sintió «utilizada, engañada y presionada» durante todo el proceso, destacando que la reunión se desarrolló en un «entorno hostil y sin libertad». Además, menciona que el impacto de estos acontecimientos le provocó problemas de salud, llegando a requerir atención médica de urgencia el 6 de septiembre por la aparición de un herpes zóster debido a «un episodio de estrés continuado». Por el contrario, García Cuervo asegura tajante que De la Fuente sí estuvo en la reunión sin ser llamado y defendió al entonces presidente federativo.