Sánchez logra lo contrario de lo que pide la UE: eleva un 53% el consumo de gas para generar electricidad
Las políticas de Pedro Sánchez están consiguiendo lo contrario de los objetivos de Bruselas para reducir el consumo de gas para reducir la dependencia europea del suministro de Rusia. El famoso «tope al gas» (la excepción ibérica) no sólo no ha logrado reducir el consumo de esta materia prima para generar electricidad, sino que lo ha disparado un 53,1% en septiembre y un 77,4% en los nueve primeros meses, según los datos dados a conocer este miércoles por la Corporación de Reservas Estratégicas (Cores).
Desde el sector eléctrico y desde la propia Comisión Europea se ha criticado esta medida española porque incentiva el consumo de gas cuando el objetivo es el contrario. Algo que demuestran ahora estas cifras. «Si se desincentivan las pujas de otras energías al reducir el precio que pueden obtener, y dada la escasez de lluvia y la falta de energía nuclear, lo que se está haciendo es quemar más gas», explica una fuente del sector.
Este fuerte incremento se compensa con una caída del consumo de gas convencional (hogares, comercios e industrias), del 35,4%, debido al tiempo cálido y a la caída de la actividad industrial, como ha venido informando OKDIARIO.
Sumando los dos efectos, el resultado neto es un descenso del consumo del 5,4% en septiembre respecto al mismo mes de 2021, hasta los 28.204 gigavatios hora (GWh). El consumo en septiembre de 2022 fue un 9,7% inferior al que hubo el mismo mes de 2019, antes de la pandemia.
A pesar del descenso en septiembre, en el acumulado de los nueve primeros meses del año el consumo total de gas natural aumentó un 4% respecto al mismo periodo del año anterior impulsado por el ascenso del consumo para generación eléctrica, el citado 77,4%, pues tanto el consumo convencional como el de gas natural licuado (GNL) de consumo directo cayeron, un 15,7% y un 30,2%, respectivamente.
El consumo de gas natural aumentó en el tercer trimestre un 3,1% respecto al mismo periodo de 2021 y alcanzó los 87.752 GWh, con un descenso del 34% del consumo convencional y del 40,5 % del GNL de consumo directo, y un aumento del 87,3% del destinado a producir electricidad.
En comparación con 2019, el consumo de gas natural en septiembre fue un 9,7% inferior, si bien el destinado a generación eléctrica (15.361 GWh) -utilizado en los ciclos combinados de producción de electricidad y que son la fuente de generación más cara con el consiguiente encarecimiento del precio de la luz- fue un 35,6% superior. Sin embargo, el convencional fue un 36,5% inferior al de entonces y el de GNL de consumo directo, que en septiembre de este año registró una caída interanual del 44,2%, fue un 31,2% menor que el del mismo mes de 2019.