Más de 10.000 personas se ven amenazadas por recortes y despidos en la industria
Los anuncios de distintos ERE y ERTE se suceden por todo el país, con la industria siderometalúrgica liderando las malas noticias. Está siendo empujada por el mal momento que vive la producción de automóviles.
Arcelor Mittal y Acerinox fueron este martes los dos valores más castigados del Ibex 35, con un 5,41% y un 3,51% de retroceso respectivamente. Que los dos valores del sector siderometalúrgico hayan sido los que más cayeron en la jornada muestra que el sector industrial afronta unos trimestres muy complicados en España. De hecho, es el principal afectado por la crisis de la producción de coches que desde hace meses castiga a las factorías españolas. Más de 10.000 trabajadores se enfrentan a recortes de horas de trabajo o a despidos en los principales fábricas españolas, según cálculos sindicales.
Hay que tener en cuenta que sólo Arcelor tiene 9.000 empleados, que llevan encadenando EREs temporales desde hace nueve años. En el sector de la siderurgia se suman Ferroatlantica (800), Alcoa (700) y Sidenor (1.500) más las amenazas de Asturiana del Zinc (900 empleados), Acerinox (ronda los 6.000) y GWS.
Este periódico ha hablado con representantes de los sindicatos industriales para saber más sobre qué ambiente se respira en las fábricas españolas.
«En los próximos trimestres veremos pérdida de empleo en la industria, eso es seguro»
«En los próximos trimestres veremos pérdida de empleo en la industria, eso es seguro. Lo que sí esperamos es que no sea de forma traumática sino con medidas como prejubilaciones», manifiesta a este diario Pedro Ayllón, secretario general de la Federación de Industria del sindicato USO.
Ayllón considera seguro que vamos a una recesión en el sector del automóvil, «que no se está produciendo sólo en España sino en Alemania, Italia e incluso Polonia. Por eso las empresas han ido echando a los trabajadores con contratos temporales y se quedan solo con los indefinidos. Lo que no creo que haya son medidas traumáticas porque las empresas ya tienen experiencia en cómo hacer bien los ajustes».
Por su parte, Raúl Montoya, secretario de acción sindical estatal de la Federación de Industria de USO, recuerda que, «desde los acuerdos de París contra el cambio climático, Alemania ha invertido 1.200 millones en transformación para el coche eléctrico y España solo 60», lo que unido a la demonización del diésel que hizo la ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, no ha ayudado nada a la buena salud del sector.
Estatuto de la industria
Precisamente los sindicatos se han reunido en los últimos meses con el ministerio de Ribera para implorarle la ayuda del Gobierno mediante el estatuto de la industria electrointensiva. «Este estatuto nos ayudaría a poner nuestros costes energéticos al nivel de, al menos, nuestros competidores europeos, ya que al ser grandes consumidores de electricidad, los precios de la energía está castigando nuestra competitividad», dicen los sindicatos.
Desde la patronal hasta los sindicatos, todo el sector industrial acusa a Ribera de haber hecho mucho daño con sus palabras sobre el diésel
Pero el parón político actual hace que las factorías estén perdiendo un tiempo precioso que les resta competitividad. El caso de Alcoa se ha salvado por la campana. La extinción de sus 686 contratos en Avilés y Coruña se ha evitado gracias a la entrada de un fondo de inversión suizo.
Pero otras factorías pueden no correr tanta suerte: GSW ha planteado un ERTE para 1.000 personas en Cantabria y Barcelona; Ferroatlántica otro para 800 trabajadores en Cantabria y Galicia; Acerinox amenaza con 5.000 personas afectadas en el Campo de Gibraltar, negociando un acuerdo marco que incluya la congelación salarial y la contención para los próximos años, a la espera de ver qué ocurre con el estatuto de grandes consumidores.
Y ¿qué decir del automóvil? Los problemas se suceden en Nissan Zona Franca, Ford Almusafes o Mercedes Vitoria. Como ya alertó la patronal siderúrgica Unesid hace sólo cinco días, el desbarajuste del diésel ha impactado en su línea de flotación. El reloj corre ahora mismo en contra de la industria española.
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