«Tenemos dudas de que los sindicatos entiendan la realidad de la fábrica de Nissan»
La caída en la demanda europea ha impactado de forma notable algunas fábricas españolas a las que los expertos señalan como amenazadas. Mientras tanto, el Gobierno de Pedro Sánchez ha destinado sus meses tras la moción de censura a sembrar dudas sobre el diésel, el combustible mayoritario de las factorías nacionales.
Las plantas de Nissan en Barcelona son actualmente las factorías de automóviles que están en el ojo del huracán dentro de la economía española. Tras confirmar 600 despidos el jueves para Zona Franca y Montcada, que ejecutará mediante medidas de carácter voluntario, la empresa se enfrenta a un duro periodo de negociaciones ante unos sindicatos con mucha fuerza en el sector industrial.
«Tenemos dudas de que los sindicatos entiendan la realidad de la fábrica de Nissan», ha comentado a OKDIARIO el responsables de comunicación de Nissan Motor Ibérica, Serafí del Arco.
Según ha dicho Del Arco, la situación de la planta barcelonesa obliga a los recortes, y la empresa ha prometido a cambio invertir 70 millones en una nueva planta de pintura.
«El coche eléctrico va a necesitar menos hh (horas por hombre) y las plantillas van a ser inferiores, pero no en Nissan sino en todas las fábricas mundiales», dice el sindicato
Sin embargo los sindicatos aseguran que son plenamente conscientes de la situación complicada que atraviesa la factoría: «Nos dicen que echan a 600 personas pero a cambio no tienen ningún modelo de fábrica. Seguro que esas 600 personas saldrán con buenas condiciones y con prejubilaciones, pero nos preocupa e futuro. Qué tipo de planta quiere la empresa. Si al final han decidido quedarse en Barcelona que creo que es el caso tienen que tomar una decisión de qué tipo de planta van a hacer y hasta ahora no han hecho nada».
Según indican fuentes de UGT «Hay que ser conscientes de que el vehículo eléctrico va a necesitar menos hh (horas por hombre) y que las plantillas vana ser inferiores, no en Nissan sólo, sino en todas las fábricas del mundo».
La situación de Nissan no es buena y de hecho la compañía no ha podido por el momento recibir ninguna carga de trabajo proveniente del Brexit: «No vamos a aprovechar nada y nos deja preocupados», dice la representación sindical.
«No tienen nada que ofrecernos»
La realidad es que la planta japonesa en la capital catalana cuenta con empleados preocupados porque hasta ahora no hay alternativas. «No nos han pedido nada de ajustes para más productividad, solo las salidas, y esto es porque no tienen nada que ofrecernos», considera UGT, quien sin embargo sí que cree que la decisión de Nissan ya es no cerrar la planta y quedarse.
«Pero queremos saber si van a invertir y cuánto. La planta ahora mismo solo tiene capacidad para 105.000 unidades a tres turnos. Si el modelo son 140.000 vehículos deberíamos ver como se hace».
Nissan cuenta con cinco centros de producción en España: en Barcelona, Ávila y Cantabria, donde fabrica la furgoneta NV200, tanto la versión de motor de combustión como la eléctrica, que es la más vendida en toda Europa, el pick-up Navara y el camión ligero NT400/Cabstar. Asimismo, fabrica componentes para varias plantas de la Alianza Renault-Nissan-Mitsubishi, tiene un centro de I+D para toda Europa, un hub de distribución y un centro de recambios. Barcelona acoge la sede comercial para España y Portugal, países en los que Nissan lidera la movilidad eléctrica y el segmento crossover, y cuenta con una red de más de 200 puntos de venta y postventa que dan cobertura a toda la Península Ibérica. En España, Nissan emplea a 5.000 personas.