Un informe revela que España puede mantener sus servicios públicos con un 40% menos de gasto
Un informe del Instituto de Estudios Económicos (IEE) muestra que España podría mantener sus servicios públicos inalterados con un nivel de gasto público muy inferior. El think tank que preside el exsecretario de Estado de Economía, Iñigo Fernández de Mesa, y que dirige el expresidente del Instituto Nacional de Estadística (INE), Gregorio Izquierdo, revela en España una investigación de un grupo profesores de la Universidad de Lisboa en la que se pone de manifiesto que con un 40% menos de gasto público el Estado del Bienestar podría haber continuado sin ninguna alteración notable entre 2003 y 2007.
Este es el párrafo que muestra que hay margen para continuar con la contención del gasto, incluido en el informe ‘La deuda pública en España’ del IEE: «Así, Alfonso et al. (2019) ponen de manifiesto que hay un amplio margen para la mejora en la eficiencia del gasto público, ya que, tras analizar dicha eficiencia en 36 países de la OCDE, concluyen que, en media, hay un margen de mejora del 33%, en comparación con los países más eficientes»; es decir, que se podrían ofrecer los mismos servicios públicos con un 33% menos de gasto, situación que en España superaría el 40% entre los años 2013 y 2017, lejos de sus mejores registros en la etapa 2003 a 2007, cuando la eficiencia del gasto público español se situó se situó en el 78%, en comparación con los países más eficientes en dicho momento».
Es decir, que la eficiencia del gasto en España necesita mejorar. Uno de los mantras que utilizan algunas formaciones políticas para justificar la subida del gasto público incluida en sus programas electorales es la comparación con otros países de la UE, aunque este argumento se desmonta en el informe del IEE con el siguiente párrafo: «Frente a la afirmación de que el nivel de gasto público de la economía española, en el 41,7% del PIB en 2018, es sensiblemente inferior al de la media de la UE-28, cabe señalar, por el contrario, que cuando se corrige por el PIB per cápita, se obtiene que el gasto público en España es un 9% superior al del promedio de la UE-28, lo que probaría que existe cierto margen para abordar la vía del gasto, a través de la contención o de la mejora de la eficiencia, como mecanismo de consolidación fiscal».
Mientras que el Gobierno en funciones quiere mantenerse en Moncloa pactando con Podemos y ERC, lo que obligaría al Estado a afrontar subidas de impuestos y del gasto público notables en el futuro para garantizar el apoyo estable de estas formaciones de izquierdas, el informe del IEE demuestra que subir impuestos es medio y largo plazo más perjudicial para la actividad económica que contener el gasto público.
El informe explica que la «contención del gasto» tiene «efecto casi nulo» en el PIB en el año en el que se aplica y «ligeramente negativo en el siguiente». «A partir del segundo año los efectos acumulados son prácticamente nulos». En cambio un «incremento de impuestos» tiene un «efecto negativo (en el PIB) algo inferior al -0,5% en el primer año y acumulado del -2% a los cuatro años».
Lo mismo ocurre al observar los efectos sobre la inversión privada. Bajar el gasto público podría generar un efecto negativo al principio del 0,5%, que podría llegar al 1% en el siguiente, aunque a largo plazo, a partir del tercer año, los efectos acumulados se vuelven «ligeramente positivos y crecientes». En cambio, el impacto de subir impuestos es mucho peor, con un «efecto negativo de aproximadamente el -1% en el año en curso y acumulado del -4% a los cuatro años».