Empresarios de Cataluña alertan: «Otra vez la ciudad en llamas cuando intentamos recuperar el turismo»
Han pasado ya seis días desde que comenzaron las protestas por la encarcelación de Pablo Hasél, condenado a nueve meses de cárcel por enaltecimiento del terrorismo e injurias a la Corona. Las manifestaciones han derivado en saqueos que han causado destrozos en numerosos comercios de Barcelona, por lo que desde Empresarios de Cataluña destacan que «otra vez vuelve a estar la ciudad en llamas cuando precisamente se intenta recuperar el turismo perdido por el coronavirus».
De acuerdo con los datos oficiales que se manejan por el momento, los daños causados por los radicales en el mobiliario urbano ascienden ya a los 600.000 euros, mientras que las pérdidas que han sufrido los comercios superaron los 750.000 euros tan sólo en la jornada del sábado. Hay que tener en cuenta que estos comercios ya se encontraban en una delicada situación financiera, como consecuencia del desplome en la facturación y las restricciones adoptadas para contener la propagación de la pandemia de Covid-19.
El presidente de Empresarios de Cataluña, Carlos Rivadulla, ha explicado a OKDIARIO que «lo que más preocupa es el daño reputacional. Ver otra vez una ciudad en llamas, problemática y conflictiva no ayuda a generar un atractivo de cara a los turistas». «Justo cuando esperábamos poder remontar los meses pasados y aumentar las reservas de cara al verano, nos encontramos con esta situación en la que los extranjeros ven una ciudad en la que no hay ni autoridad política ni moral. Lamentablemente una vez más, el comportamiento de nuestros gobernantes no ayuda», añade.
Cataluña es una de las comunidades que más ha sufrido el desplome de la demanda de turistas como consecuencia de las restricciones de movilidad adoptadas y de los meses de confinamiento. Así, el sector turístico en conjunto tiene la mirada puesta en la campaña de verano en la que espera recuperar parte de la facturación perdida durante el pasado 2020.
Las pequeñas y medianas empresas (pymes) de los sectores del comercio y la restauración llevan meses tratando de reflotar sus negocios y reclamando ayudas directas a las administraciones. Por ello, estos saqueos suponen un duro golpe para muchos empresarios, que están viendo como las autoridades catalanas permanecen impasibles y no condenan unos actos que agravan la crítica situación en la que se encuentran muchas empresas.
«Ya sufrimos este tipo de violencia radical en 2019, y costó mucho volver a generar seguridad de cara a los turistas y visitantes extranjeros. Tras la pandemia, ahora vuelve a repetirse la misma situación y las empresas vuelven a encontrarse solas sin el apoyo de las instituciones que representan a todos los catalanes», denuncia Rivadulla.
Cámara de Comercio
La pasada semana se conoció la noticia de que la Cámara de Comercio de Barcelona ha perdido a tres importantes compañías: Abertis, Naturgy y Catalonia Hotels, que han decidido abandonar el pleno ante la falta de interés en seguir participando como consecuencia de la constante negativa de aceptar sus propuestas. De esta forma el organismo pierde a tres de sus 14 miembros de ‘silla de plata’, reservadas a las empresas que aportan en torno a 75.000 euros anuales.
Estas ‘sillas de plata’ se renuevan anualmente y las tres empresas notificaron su decisión de no continuar ocupándolas antes de finalizar 2020, tal como se hizo efectivo en enero, en el primer pleno ordinario del año de la entidad liderada ahora de manera interina por Mònica Roca, tras la dimisión de Joan Canadell para presentarse en las elecciones al Parlament.
«Todo lo que está pasando no sólo es la puntilla a nivel económico tras la crisis del coronavirus, sino que también supone la puntilla a nivel moral para los trabajadores y empresarios catalanes», remarcan desde Empresarios de Cataluña. «El comercio y la restauración ven como tienen a cientos de trabajadores en un Expediente de Regulación Temporal del Empleo (ERTE) y que trabajan con todo tipo de restricciones y ahora también tienen que vivir como estos radicales les revientan las tiendas y saquean sus negocios», añaden.
Las empresas negaron que su salida estuviera relacionada con la tendencia independentista del Joan Canadell, hasta ahora presidente de la entidad y nuevo diputado de JxCat, aunque sí que señalan que ha habido ciertas discrepancias en la relación. El principal motivo es la sensación de que las medidas que estas tres entidades llevan al pleno, son ignoradas y no son tenidas en cuenta.