Empleo ampliará los permisos de paternidad a un mes e impulsará el fondo de capitalización del paro

El Gobierno va a presentar una reforma para ampliar los permisos de paternidad hasta las cuatro semanas y va a estudiar detenidamente la puesta en marcha del fondo de capitalización del paro que acompaña a los trabajadores a lo largo de su vidas laborales y que se conoce popularmente como “mochila austriaca”. Este fondo supone una revolución en materia de protección social, ya que el dinero acumulado sirve para afrontar eventuales despidos, situaciones de movilidad geográfica, financiar formación o costear la jubilación.

Así lo ha avanzado hoy la ministra de Empleo y Seguridad Social, Fátima Báñez, que ha comparecido ante la Comisión de Empleo y Seguridad para informar sobre las líneas generales de la política que desarrollará en su departamento durante la Legislatura que ahora comienza. La ampliación del permiso de paternidad podría estar ya incluida en los Presupuestos Generales del Estado (PGE) de 2017.

Los cuatro ejes son consolidar la recuperación del empleo manteniendo el ritmo de 500.000 puestos de trabajo netos creados cada año, mejorar la gestión de las políticas activas en colaboración con las comunidades autónomas, reforzar de la «sostenibilidad y suficiencia» de las prestaciones, especialmente de las pensiones, e integrar a los inmigrantes en materia laboral.

Además, la ministra ha anunciado que pretende alcanzar con el resto de grupos parlamentarios un Pacto Nacional para la conciliación y la racionalización de horarios, que incluirá un estudio sobre los efectos de un cambio del huso horario. El objetivo es que la jornada laboral en España termine a las 18:00 horas de la tarde, una medida que está en la agenda del Gobierno y que ya avanzó el pasado abril el presidente, Mariano Rajoy.

¿Qué es la mochila austriaca?

PP y Ciudadanos incluyeron en su pacto de 150 medidas una reforma del sistema de prestaciones introduciendo el fondo de capitalización. Lo que se propone en España no es exactamente el mismo modelo que el que hay en el sistema austriaco, sino un estado intermedio en el que se combine la indemnización tradicional con la nueva “mochila”, ya que en Austria cuando se despide a un trabajador no se le abona ninguna cantidad adicional al citado fondo. En España se aplicaría un sistema mixto, por lo menos hasta que se logre una transición plena hacia el nuevo modelo.

La principal novedad que plantea este modelo es que los trabajadores van acumulando dinero en el fondo aunque no sean despedidos, de una forma similar al abono de las cotizaciones sociales a la Seguridad Social que pagan empleados y empresas en el actual sistema de reparto. La diferencia es que ese dinero de la “mochila” no iría destinado a pagar subsidios ni prestaciones de otras personas, sino que se mete en una cuenta individual invertida en activos de máxima calidad crediticia que van generando rendimientos.

De esta forma, el trabajador puede conocer en todo momento a cuánto asciende el ahorro de este fondo que podrá recuperar si lo estima conveniente si es despedido o si se jubila. Se trata de una decisión individual, ya que si el empleado no quiere rescatarlo cuando abandona la empresa, puede conservarlo porque le acompaña a lo largo de toda su vida laboral incluso si se da de baja voluntaria (en la actualidad si la salida de la empresa es voluntaria el empleado lo pierde todo).

Otro de los aspectos positivos es que fomenta la contratación indefinida, al eliminar el incentivo a la contratación de temporales para reducir el impacto de un eventual despido en los dos primeros años de contrato. Por ello, a la larga, el modelo de capitalización austriaco tiene a eliminar los diferentes tipos de contrato, hasta llegar a un modelo único de contratación indefinida, que se complementaría con el temporal (para aquellas actividades que así lo requieran) y uno de aprendizaje o prácticas.

Finalmente, la introducción de este nuevo sistema de indemnización podría servir para plantear una reforma también de la Seguridad Social, ya que una vez que todos los trabajadores tengan su fondo de capitalización se liberará de recursos al modelo público de protección. Serviría, por tanto, como una alternativa o complemento al sistema de pensiones actual.

Reforma de la financiación de la Seguridad Social

En lo que respecta a la Seguridad Social, la ministra ha admitido que uno de sus objetivos es “avanzar en la separación de fuentes de financiación”, es decir, que una parte de las pensiones sean financiadas con cargo a los PGE y no mediante la caja única del sistema de protección. En concreto, se trata de las pensiones de viudedad y orfandad, aunque el Gobierno descarta la creación de un impuesto dedicado exclusivamente a financiarlas, tal como avanzó OKDIARIO.

En esta línea, Báñez ha indicado que el incremento de las cotizaciones sociales que pagan los salarios más altos (el conocido como “destope”) debe acompañarse también de un aumento de las pensiones máximas, aunque ha señalado que serán los grupos parlamentarios en el marco del Pacto de Toledo los encargados de realizar propuestas concretas. De momento, se ha elevado un 3% la base máxima de cotización, lo que generará unos ingresos anuales de 310 millones de euros anuales en las arcas de la Seguridad Social.

Báñez: “Las pensiones en España están garantizadas”

La ministra ha descartado que todas estas reformas de la Seguridad Social se realicen porque peligre el pago de las pensiones ni a corto ni a medio plazo, sino porque se pretende dotar al sistema de una sostenibilidad que le permita seguir cumpliendo su función. «Las pensiones en España están garantizadas, se pagarán hoy con normalidad y también en el futuro, pueden estar tranquilos”, ha declarado Báñez.

Respecto a los autónomos, una de las primeras leyes a tomar en consideración será la Ley integral de apoyo a los trabajadores por cuenta propia, con la que se ampliará la tarifa plana de 50 euros, se modificará el régimen de altas y bajas de cotización para que sean efectivas en el día de solicitud, se pondrá en marcha una norma para facilitar la continuidad de negocios y compatibilizar el empleo y la pensión, y se introducirán mejoras en el acceso al cese de actividad.