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Las eléctricas denuncian que el atasco de Ribera con las renovables ha subido el precio de la luz un 50%

Gobierno Junta
Teresa Ribera, ministra de Transición Ecológica.
Carlos Ribagorda

Mientras el Congreso da un paso más este martes en la tramitación del impuesto a las eléctricas por sus supuestos beneficios extraordinarios, las principales empresas del país manejan datos que calculan que el 50% de lo que ha subido el precio de la electricidad en España se habría evitado si la ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, hubiese aprobado en tiempo y forma la puesta en marcha de instalaciones fotovoltaicas y eólicas que ya tienen los permisos del regulador.

Redeia, antigua Red Eléctrica, tiene concedidos permisos para instalaciones de renovables a cierre de octubre de 143.700 MW de potencia, más otros 32.700 MW en estudio. La cifra es prácticamente similar a la que había hace más de un año, lo que implica que la potencia instalada de electricidad en España ha crecido mucho menos de lo que podría. La consecuencia es que el gas ha sido la principal fuente de energía y los precios se han disparado.

«El precio de la luz podría haber subido un 50% menos de lo que lo ha hecho si el Gobierno, responsable del visto bueno de instalaciones superiores a 50 MW -las comunidades autónomas, del resto-, hubiese arreglado el cuello de botella que existe actualmente por su burocracia», señalan desde una eléctrica.

De acuerdo con los datos de Red Eléctrica, este año la capacidad instalada de energía eólica en España ha crecido en 963 MW, mientras que la fotovoltaica lo ha hecho en 2.299 MW para sumar un total de casi 48.000 MW. En total, la energía renovable que está en disposición de generar electricidad ha aumentado en lo que va de año en casi 3.300 MW, mientras que la capacidad que está esperando a poderse enganchar al sistema suma 176.400 MW.

Para las eléctricas, se trata de un problema fundamental que está aumentando el precio de la electricidad y está beneficiando a las gasistas. Se utiliza más gas para generar electricidad y el precio, sumando al compensación, es más caro que si las renovables lideraran la generación eléctrica.

Desde que se ha puesto en marcha el sistema del tope al gas, el 15 de junio de este año, el uso del gas para generar electricidad se ha multiplicado por dos frente a otros veranos. Sólo ha empezado a descender cuando el precio del gas ha bajado y la llamada excepción ibérica ha dejado de aplicarse al situarse por debajo de los 50 euros.

Ribera apremia a las CCAA

Mientras, la ministra Ribera ha apremiado a las comunidades autónomas a acelerar en la burocracia para que la mayor parte de los proyectos entren en funcionamiento antes de que finalice el plazo dado por el Gobierno -febrero de 2023-. Ribera ha señalado públicamente que no extenderá más el plazo, como en otras ocasiones. Los gobiernos regionales son los responsables de los proyectos que no superen los 50 MW, y el Gobierno central, del resto.

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