ACS acelera su crecimiento en EEUU y logra un nuevo contrato en Houston por 900 millones

ACS Carolina del Norte
El presidente de ACS, Florentino Pérez, durante su intervención en la Junta de Accionistas de la compañía. (Foto: EFE)

La empresa ACS ha vivido un día de pleno protagonismo en Estados Unidos, haciéndose con hasta tres contratos para otros tantos proyectos por un valor total de cerca de 1.700 millones de euros. A última hora de este martes, se comunicaba la obtención de un gran contrato para hacerse con la concesión de una autopista de peaje en Houston, en el estado de Texas, por 900 millones. Esta adjudicación viene a sumarse a los dos logrados en este mismo día para la mejora del transporte por las carreteras que rodean la ciudad de Los Ángeles.

En el caso del nuevo contrato en Houston, ACS se hace con el control, a través de su filial Iridium, de la concesión de la autopista SH-288. En concreto, el grupo español que preside Florentino Pérez especifica que se hace con el 44,65% de capital en la concesión. Con este incremento, adquirido a los fondos de infraestructuras InfraRed Capital Partners, Northleaf Capital Partners y Star America, la compañía pasa a ostentar un 66,27% del capital invertido en el proyecto y a tomar el control de la concesión.

El cierre de la operación está sujeto a la obtención de las pertinentes aprobaciones administrativas, incluyendo la aprobación del Departamento de Transportes de Texas, así como de las instituciones que financian el proyecto, incluido el Departamento de Transporte de Estados Unidos, quien participa a través de su programa de financiación Tifia. La duración de esta concesión se adjudicó por 52 años en 2015 por el Departamento de Transporte del estado de Texas al consorcio liderado por Iridium, consorcio en el que también participan las empresas constructoras de ACS.

Este contrato incluía la financiación, diseño, construcción y operación de cuatro nuevos carriles de peaje en la mediana del corredor y sus accesos, la rehabilitación y mejora de las calzadas y enlaces de la autopista existente, y el acceso al complejo hospitalario conocido como Texas Medical Center.

El grupo ha destacado que la concesión se trata de una de las obras de infraestructura más importantes acometidas en el área metropolitana de Houston. Como media, el corredor es transitado a diario por más de 160.000 vehículos, de los que aproximadamente 14.000 optan por utilizar los nuevos carriles de peaje.

Iridium lidera las tareas de operación y mantenimiento del tramo de autopista, incluyendo la gestión de los nuevos carriles mediante la aplicación de una tarifa de peaje que variará en función del nivel de congestión. La recaudación del peaje se realiza a través de un sistema de cobro electrónico de peaje tipo ‘Free Flow’, y para la operación de los carriles se emplea la última tecnología en gestión inteligente de autopistas. En la actualidad, Iridium cuenta con seis contratos de concesiones en Estados Unidos, con un valor de gestión superior a los 6.000 millones de euros.

Proyectos en California

En este mismo día, ACS lograba, a través de otra de sus filiales norteamericanas, en este caso Flatiron, dos nuevos contratos en Los Ángeles valorados en 800 millones de euros orientados a la mejora del transporte en las carreteras que rodean a esta urbe de casi 19 millones de habitantes, incluida su área metropolitana. La compañía, en joint venture con la firma local Myers & Sons Construction, se ha impuesto en el contrato para construir nuevos carriles rápidos de alta ocupación en la carretera I-105.

De forma paralela, en otra joint venture con las empresas Stacy and Witbeck y Modern Railway Systems, Flatiron será la encargada de desarrollar una nueva línea de autobús rápido, también en Los Ángeles y por un importe de 300 millones de euros. Este nuevo proyecto de la filial de ACS en Estados Unidos consiste en la construcción de carriles separados para una nueva línea del llamado G-Line Bus Rapid.

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