Simeone vuelve a cambiar la historia
41 derbis con el Cholo: 11 victorias, 14 empates y 16 derrotas
Los 41 derbis anteriores al Cholo: 3 victorias, 10 empates y 28 derrotas
El Atlético descabeza al Madrid
Simeone vuelve a cambiar la historia. El de ayer es su tercer triunfo en Liga ante el Real Madrid en el estadio rojiblanco, el segundo en el Metropolitano, una hazaña que sólo habían conseguido tres entrenadores en la historia del club, los míticos Ricardo Zamora, Helenio Herrera y, por supuesto, Luis Aragonés. Son ya 41 derbis ante el eterno rival en la era del Cholo con el saldo de 11 victorias, 14 empates y 16 derrotas. Por ponerlo en contexto, el balance de los 41 anteriores al técnico argentino fue de tres victorias, 10 empates y 28 derrotas.
Simeone es el único entrenador que, en la era moderna, ha sido capaz de conseguir que el Atlético se sentara en la misma mesa que el Real Madrid. Ricardo Zamora logró cuatro victorias ante los blancos en el antiguo Metropolitano en la década de los 40, Helenio Herrera sumó tres a comienzos de la década de los 50 y Luis Aragonés cimentó su marca con cuatro resultados positivos en el Calderón en tres etapas diferentes, pero desde el 3-1 de la temporada 98-98 (con Antic en el banquillo) hasta el 4-0 del Cholo del curso 14-15 pasaron nada menos que 14 derbis consecutivos sin que el equipo fuera capaz de meterle mano a su eterno rival, que desde 2002 hasta 2013 ganó 11 de 12 partidos disputados en el estadio Vicente Calderón.
Sime𝗼𝗻𝗲 pic.twitter.com/R8IYlct3p3
— Atlético de Madrid (@Atleti) September 24, 2023
El resultado devuelve al Atlético a la cabeza de la Liga, aunque la derrota de Valencia, el empate del Villamarín y el partido aplazado ante el Sevilla le condenan a la quinta posición y le mantiene a seis puntos de una cabeza en la que se encuentran el FC Barcelona y el sorprendente Girona, que precisamente este próximo fin de semana recibirá al Real Madrid en Montilivi.
Ésta será de nuevo una semana de dos partidos para el Atlético. El jueves en Pamplona ante Osasuna y el domingo en el Metropolitano ante el Rayo. El equipo sigue obligado a ganar sí o sí y a Simeone no dejan de cáersele jugadores. Ayer se resintió de nuevo Koke, que sólo aguantó la segunda parte, y Giménez tampoco pudo acabar el partido. Sería un drama si el capitán hubiera recaído de su lesión porque ya no quedan centrocampistas, pero éste es el pan de cada día en un equipo que tiene a más futbolistas en la enfermería que fuera de ella.