Mendes quiere colocar a Joao Félix en el PSG pero Luis Enrique duda
Jorge Mendes está haciendo lo imposible por sacar a Joao Félix del Atlético de Madrid, donde su situación es insostenible, y colocarlo en el PSG. Pero se ha encontrado con un obstáculo: Luis Enrique. El nuevo técnico del equipo parisino duda sobre cómo encajar a Joao Félix en su idea de juego y sobre el rendimiento del luso tras sus últimas dos temporadas con Simeone y su fallida cesión al Chelsea.
No sólo de Mbappé viven los culebrones del verano. También Joao Félix, esa incómoda piedra en el zapato de Simeone (y del Atlético de Madrid) que no hay forma de sacar. Ni siquiera el todopoderoso Jorge Mendes parece capaz de encontrar equipo al que hace unos años era, posiblemente, el futbolista más prometedor del mundo. Qué lejos quedan los tiempos en los que Joao Félix era codiciado por todos los grandes de Europa y acabó en el Atlético previo pago de 120 millones.
Ahora la estrella de Joao Félix parece apagada y el Atlético no tiene ninguna oferta por él ni siquiera para repetir la huida hacia adelante de una cesión como después del Mundial. La única puerta que, de momento, parece entreabierta para el mediapunta portugués es la del PSG, club con el que Jorge Mendes lleva varios meses en conversaciones.
Luis Enrique se lo piensa
Sin embargo, el aterrizaje de Luis Enrique por Galtier en el banquillo de El Parque de los Príncipes dibuja un nuevo escenario en la política de fichajes del PSG. Al ex seleccionador español, que también mantiene una estrecha relación con Jorge Mendes, le han puesto sobre la mesa la opción de Joao Félix. Pero no le convence demasiado. Igual como segundo o tercer plato sí, pero no como principal.
Por eso la llegada de Joao Félix al PSG no está descartada pero sí paralizada. Luis Enrique quiere analizar primero lo que tiene en su plantilla, con exceso de futbolistas, antes de dar el sí a un jugador como el luso, que condicionaría no sólo el esquema de juego a utilizar sino también el ecosistema de un vestuario en el que la convivencia entre las grandes estrellas no siempre ha funcionado bien.