Alonso adelanta a Ferrari en el último test

La cosa no pinta ni mucho menos tan mal como cuando acabó la primera tanda de entrenamientos en el circuito de Montmeló el pasado jueves. Aquel día, Alonso sólo pudo dar tres vueltas al trazado catalán por problemas en un sensor del McLaren-Honda y esta circunstancia hizo reaparecer los fantasmas de la temporada anterior.

Hoy Alonso ha disipado gran parte de las dudas sobre su monoplaza con una actuación que esperanza a todos los aficionados españoles a la Fórmula 1. El español pisó a fondo su motor Honda para comprobar que no está tan lejos como todo el mundo se piensa de las posiciones de cabeza. Hasta tal punto que Fernando firmó una jornada mucho más positiva que su antiguo equipo, Ferrari, con Kimi Raikkonen a los mandos del coche rojo.

Alonso dio 93 vueltas al circuito catalán y fue bajando los cronómetros de los 1:30 iniciales a un 1:24,252, un tiempo seis décimas más rápido que el mejor de su ex compañero en Ferrari y que además sólo realizó 72 giros a Montmeló. En el global, Alonso concluyó en tercera posición de la jornada únicamente con el Mercedes de Nico Rosberg y el Williams de Valtteri Bottas por delante, aunque no a una distancia tan grande como la temporada anterior. El asturiano está a menos de 1,2 segundos del Mercedes.

«Creo que tenemos opciones de acabar este año en algunas carreras en el podio». Este es el pronóstico que el propio Alonso hace. Con este resultado en el bolsillo, y sabiendo que habrá sustos de fiabilidad como al término de la sesión matinal –se quedó parado el coche en la recta de meta–, no cabe duda de que el español no va de farol. La escudería anglo-japonesa ha dado hoy un golpe sobre la mesa.