5 sorprendentes cosas que tu popó dice sobre tu salud
Aunque sea un tema tabú en la sociedad, lo cierto es que las heces son un claro indicativo del estado de salud de una persona. Un cambio en su forma, color o composición puede ser síntoma de diferentes enfermedades. Por este motivo, aunque no resulte demasiado agradable, los expertos recomiendan de vez en cuando observar el popó para saber si sufrimos una intolerancia o una alergia, por ejemplo.
Se calcula que las personas que llegan a la vejez evacuan a lo largo de su vida entre 4.000 y 5.000 kilos de heces. Hay algunos excrementos que flotan y otros que se hunden. Pues bien, esto tiene una explicación muy sencilla. Todas las personas que no presentan problemas de absorción tienen en su materia fecal un exceso de gas que hace que ésta flote.
Escala de heces de Bristol
Lo primero y más importante es saber que las heces se componen en un 75% de agua. El 25% restante lo forman bacterias, células, fibra y moco. La escala de heces de Bristol establece que existen siete tipos de excrementos distintos.
- Tipo 1: las de tipo uno son las heces de pequeño tamaño, cuya forma es similar a la de la nuez. Por lo general tienen una consistencia dura y, a pesar de ser pequeñas, son difíciles de expulsar.
- Tipo 2: en este caso el popó es alargado, con la forma de una salchicha. Sin embargo, no es liso, sino que presenta una serie de bultos.
- Tipo 3: la forma de los excrementos es igual a la del tipo dos (salchicha), pero en la superficie no presentan bultos sino surcos.
- Tipo 4: son las heces ideales, con aspecto de salchicha suave y blanda.
- Tipo 5: según la escala de heces de Bristol, las heces de tipo cinco son aquellas que son trozos blandos y con bordes muy bien definidos. Son frecuentes en caso de diarrea.
- Tipo 6: los excrementos tipo seis son pequeños trozos blandos cuyos bordes se deshacen. Son relativamente peligrosos porque si se expulsan de forma continua el riesgo de deshidratación es muy alto.
- Tipo 7: y, por último, las heces tipo siete. Son totalmente líquidas y se dan sólo cuando la persona sufre diarrea.
Color del popó
Uno de los aspectos más importantes es el color y el olor de las heces. Sí, los excrementos siempre huelen mal, pero si el olor es especialmente desagradable, podría ser un indicativo de una enfermedad como la pancreatitis crónica o la enfermedad de Crohn, entre otras.
Marrón
Cuando el popó es de color marrón significa que el estado de salud es bueno, y la persona lleva una alimentación saludable y equilibrada, que le aporta todos los nutrientes que necesitas.
Amarillo
Las causas por las que las heces son amarillas pueden ser varias. Una de las más frecuentes es la ingesta de alimentos o colorantes alimenticios de este color. En este caso, deberían volver a su color marrón normal pasados uno o dos días. Si no es así, puede deberse a una infección causada por un parásito que recibe el nombre de giardia.
La giardosis es una infección intestinal cuyos principales síntomas son hinchazón, cólicos, diarrea acuosa de color amarillo y náuseas. Los signos duran entre dos y seis semanas. Es importante consultar con el médico para evitar deshidratación y posibles complicaciones.
Rojo
Cuando las heces presentan un color rojo brillante se debe a la presencia de sangre que puede proceder de una hemorroides. Las hemorroides son muy comunes entre la población adulta. Son venas hinchadas en la parte inferior del recto y en el ano. Los síntomas más habituales son: dolor, hinchazón alrededor del ano, sangrado e irritación. Si hay sangrado en las deposiciones es importante consultara al médico.
Verde
Un consumo excesivo de verduras de hoja verde como las espinacas puede hacer que el popó sea de este color. Sin embargo, también puede significar que los alimentos atraviesan el intestino grueso demasiado rápido, impidiendo así que la bilis se descomponga.
Negro
Y, por último, las heces negras o alquitranosas. Son una señal de un problema localizado en el tracto digestivo superior, como un sangrado en el estómago o en la parte derecha del colon. Las heces de este color indicanque el sangrado se encuentra en la parte superior del tracto gastrointestinal. La sangre es más oscura porque se digiere a través del tracto. Mientras, la sangre fresca o roja en las heces son una señal de que el sangrado está en el recto o en el ano.
Por último, cabe señalar que el doctor Anish Sheth hizo un estudio para mostrar las diferencias culturales a la hora de hacer popó. Por ejemplo, en el sur de Asia van al baño tres veces más que en el Reino Unido. Además, en Occidente las personas tienen un patrón de horario habitual para hacer de vientre.