SANIDAD VALENCIANA

El otro plan de choque de Mazón en Sanidad: medidas «del siglo XXI» para atraer médicos donde no hay

La iniciativa afecta a las zonas de difícil cobertura e incluirá mejoras retributivas, de incentivos, curriculares y más inversiones

El objetivo es que los pacientes de las zonas de difícil cobertura tengan acceso a la misma calidad asistencial del resto

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Sanidad valenciana médicos
Marciano Gómez, durante la reunión con el Departamento de Salud de Vinaroz, en Castellón.
Ignacio Martínez

El Gobierno valenciano del popular Carlos Mazón pondrá en marcha un marco normativo específico para atraer médicos y personal sanitario a las zonas de difícil cobertura. La iniciativa, que parte de la Consejería de Sanidad que dirige Marciano Gómez, incluye más inversiones, mejoras retributivas y medidas de fidelización. La propuesta del nuevo consejero de Sanidad valenciano es, de facto, un plan de choque para dotar de facultativos y personal sanitario las zonas a las que estos no van por diferentes cuestiones, con el objetivo de que los pacientes de esas áreas tengan acceso a los mismos derechos asistenciales que el resto.

La iniciativa supone, también de facto, una transformación radical respecto al modelo puesto en marcha por el Ejecutivo de Ximo Puig. Se trata de un cambio de paradigma que Gómez ha definido de modo muy sencillo: «Medidas del Siglo XXI que aporten soluciones a problemas del Siglo XXI».

Mazón anunció hace meses la puesta en marcha de un plan de choque en la sanidad valenciana que pusiera punto y final a la desesperada situación que facultativos, sanitarios y pacientes han vivido estos años. Se trata de una cuestión que abarca desde infraestructuras a medios y personal. Sobre todo, médicos, porque es en torno a esta figura en la que confluye todo.

Si no hay médicos, las revisiones se ralentizan, las agendas se incrementan, los tiempos de espera crecen y las listas, también de espera, se prolongan hasta el infinito. Un ejemplo claro de todo ello son las denominadas zonas de difícil cobertura, aquellas a las que los facultativos se resisten porque no cuentan con incentivos, ni con seguridad laboral ni con los medios adecuados.

Difícil cobertura

Paradigma de esta situación es Vinaroz, en Castellón, con 90.000 cartillas asignadas, donde según publicó ya en octubre de 2022 OKDIARIO, la falta de anestesistas suponía 135 días de espera para una cirugía y 10 meses de espera para una citología. Es un ejemplo del padecimiento que se ha vivido allí, pero también en otras zonas con similares problemas.

El consejero de Sanidad del Gobierno de Mazón ha anunciado la elaboración de un marco normativo específico y, en consecuencia, distinto al resto. El objetivo es tratar desde un enfoque multidisciplinar la situación de los departamentos de salud de difícil cobertura. Es decir, hacerlos atractivos a los médicos y al personal sanitario para que su rechazo se convierta en agrado y que de ese modo los pacientes reciban las mismas atenciones que en cualquier otro lugar del territorio.

Ese nuevo enfoque incluye más inversiones, mejoras retributivas y curriculares para los profesionales y la implementación de otras iniciativas que favorezcan la fidelización de los profesionales y en consecuencia su permanencia en esos escenarios, que hoy no les atraen.

No se trata de una iniciativa lanzada para ver cómo responde el colectivo. Según ha podido saber OKDIARIO Marciano Gómez ya ha iniciado discretos contactos para sentar las bases del diálogo con los sindicatos, que arrancarán en septiembre.

Según las fuentes consultadas, se trata de medidas de incentivación, de ahí la inclusión de mejoras retributivas reales frente a las planteadas por el Ejecutivo anterior que no eran del agrado de los profesionales. Pero también, de contratos más largos y con mejoras en los currículos. Tres cuestiones ampliamente demandadas por el sector.

Ese nuevo marco normativo tampoco es casual, responde a que las medidas implementadas por el Gobierno de Ximo Puig no estaban dando solución a los problemas reales. De ahí, la necesidad de innovar. Y, sobre todo, aplicar a los problemas del Siglo XXI «soluciones del Siglo XXI». El anuncio ha sido bien acogido por los médicos, según han confirmado fuentes sindicales de este colectivo.

 

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