El Museo de Historia de Cataluña exhibe la pancarta de Torra por la que fue inhabilitado
Quim Torra, el ex presidente de la Generalitat de Cataluña, ha donado la pancarta en apoyo de a los presos golpistas del 1-O por la que fue inhabilitado de su cargo al Museo de la Historia de Cataluña. La donación tuvo lugar en un acto celebrado en el propio museo y en el que participaron su directora, Margarida Sala, y Josep Manuel Rueda, director de la Agencia Catalana del Patrimonio Cultural. La pancarta se podrá ver expuesta en el museo en los próximos días.
Quim Torra fue inhabilitado a finales del pasado mes de septiembre de su cargo como presidente de la Generalitat por un delito de desobediencia. El ex president colgó una pancarta en el balcón del Palau de la Generalitat en apoyo a los presos ahora condenados por el 1-O semanas antes de las elecciones municipales de mayo de 2019. La Junta Electoral Central ordenó su retirada por ser un «símbolo partidista». Torra se negó a retirarla y el Tribunal Supremo ratificó por unanimidad la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña que le condenaba a una pena de 18 meses de inhabilitación pode desobediencia.
«No nos desviemos del 1-O»
El que fuera presidenta autonómico conserva desde entonces su sueldo vitalicio, una oficina con personal de libre designación con sueldos de 100.000 euros a su disposición y coche oficial hasta el final de su vida. Este miércoles quiso recordar su mandato al donar la pancarta que le costó la inhabilitación y que luce el siguiente lema: «Libertat para los presos políticos y exiliados», en alusión a los dirigentes condenados por el Tribunal Supremo por el referéndum ilegal del 1-O y a los que siguen fugados de la justicia española.
«He entregado al Museo de Historia de Cataluña la pancarta que exigía la libertad de los presos políticos y el retorno de los exiliados y que fue el origen de mi aberrante inhabilitación. La lucha por los derechos civiles, la justicia y la libertad es una exigencia democrática», aseguró Quim Torra en un mensaje colgado en su perfil de Twitter.
Avui he lliurat al @mhistoriacat la pancarta que exigia la llibertat dels presos polítics i el retorn dels exiliats i que fou l’origen de la meva aberrant inhabilitació. La lluita pels drets civils, la justícia i la llibertat és una exigència democràtica. pic.twitter.com/0yo6qQFyk8
— Quim Torra i Pla (@QuimTorraiPla) December 2, 2020
El ex presidente catalán pidió a Pere Aragonès, su sucesor al frente del Govern como presidente interino, «no desviarse en absoluto del mandato del 1 de octubre». «Si nos desviamos de lo que nuestros ciudadanos, con su voto, con su sacrificio, su coraje y con su compromiso hicieron, nada de lo que ha pasado estos últimos tres años tiene sentido», apostilló Torra.
El 131 presidente de de la Generalitat aseguró que fue inhabilitado «por colgar una pancarta, sino por colgar esta pancarta, con lo que decía». «Cataluña es un país que está en un proceso de independencia y que vive una represión por parte de los gobiernos españoles, que le impiden ser libre. Mi deber era dejar bien claro que el gobierno de Catalunya estaba al lado de lo que la ciudadanía de Catalunya había expresado pacíficamente y democráticamente», añadió.
Lejos de arrepentirse de su decisión, afirmó que volvería a colgar la pancarta en caso de que volviese a estar al frente del Govern catalán. «Quizás cambiará la expresión», indicó porque, a su juicio, hay «2.850 personas que están represaliadas por los gobiernos españoles, ya sean de izquierdas o de derechas».
Pacto de Sánchez con ERC
Pere Aragonès, presidente interino de la Generalitat y coordinador nacional de ERC, cerró un acuerdo con el Gobierno de Pedro Sánchez para apoyar los Presupuestos Generales del Estado de 2021. Los separatistas apoyarán las cuentas públicas a cambio de que el Ejecutivo central invierta más de .300 millones de euros en Cataluña. «Cataluña recibirá por encima de su aportación al PIB español. Nunca había ocurrido», señaló el propio Aragonès en rueda de prensa para justiciar el ‘sí’ de ERC a los Presupuestos.
Otra de las condiciones que pusieron los separatistas y que el Gobierno de Sánchez aceptó fue la subida forzosa de los impuestos a la Comunidad de Madrid hasta llegar a los 5.9000 millones de euros.
Indulto a los golpistas
Podemos exigió, como socio del Gobierno de Sánchez, que los presos golpistas del 1-O pudieran hacer campaña en plena libertad para las próximas elecciones autonómicas catalanes del 14 de febrero, más allá del régimen de semi-libertad que ya podrían tener para esa fecha.
Así lo pidió en rueda de prensa Jaume Asens, presidente del grupo parlamentario de Podemos en el Congreso, al ministro de Justicia, Juan Carlos Campo. «Ahora mismo existen dos vías posibles para conseguir la libertad, una es la del indulto. Nosotros consideramos que es preocupante el tiempo que está tardando el Tribunal Supremo en evacuar su informe, cuando es el único caso que tiene entre manos el Supremo», señaló Asens. La otra opción pasa por formar el delito de sedición, algo a lo que el Ejecutivo de Pedro Sánchez también está dispuesto a hacer.