Los suplementos vitamínicos en niños

suplementos vitamínicos
Los suplementos vitamínicos y los niños. Lo que hay que saber

La salud es, sin lugar a dudas, una de las cosas que más preocupa a los padres respecto a sus hijos. Por ese motivo, hay muchos que no dudan en administrar a los pequeños lo que son suplementos vitamínicos. Lo hacen porque consideran que así es la mejor manera de garantizar que sus organismos contarán con todos los micronutrientes que necesitan para crecer sanos y fuertes.

Sin embargo, hay que tener en cuenta que esa administración solo debe realizarse en determinados momentos y con la autorización médica necesaria. Sigue leyendo y conocerás todos los datos más importantes al respecto.

¿Qué son?

Lo primero que hay que conocer es qué son los suplementos vitamínicos. En este caso, tenemos que exponer que se trata de unos preparados que contienen vitaminas. Su objetivo es conseguir que la persona, en este caso un niño, que tenga deficiencias alimentarias o lleve a cabo una dieta inadecuada por ejemplo, pueda aportar a su organismo todos los nutrientes necesarios. Es decir, los que requiere para poder crecer sano y fuerte.

Lo habitual es que aporten vitaminas, minerales, omega 3, oligoelementos…

¿Son realmente necesarios los suplementos vitamínicos?

Hay familias donde casi por regla general se le da un suplemento vitamínico diario a cada hijo. Y es que los adultos consideran que esa es la manera de cerciorarse de que sus pequeños tienen todos los micronutrientes necesarios.

No obstante, aunque existen posturas encontradas en ese sentido, hay que establecer que lo habitual es que los pediatras no aconsejen la ingesta de esos preparados, salvo que haya situaciones que así lo aconsejen.

Una dieta sana, completa y equilibrada, donde tengan mucha presencia la fruta y las verduras, sería suficiente para no tener que recurrir a esos preparados que nos ocupan.

En concreto, pueden determinar que sí son necesarios en casos como estos:

  • Cuando el niño tiene unos hábitos alimentarios absolutamente inapropiados e inadecuados.
  • En el caso de que el menor se presente siempre con muy poco apetito.
  • Si el menor lleva a cabo una dieta selectiva y restrictiva. Este sería el caso, por ejemplo, de niños que siguen una alimentación vegetariana o vegana. Y es que el hecho de que no coman ciertos productos hará necesario que sí tomen suplementos para poder suplir la carencia de los alimentos que aportan determinados micronutrientes.

No obstante, sea como sea, lo que está claro es que los suplementos deben administrarse a los niños por un motivo y, por supuesto, con el respaldo del pediatra.

suplementos vitamínicos
Una dieta sana, completa y equilibrada, la mejor opción

Cuidado con los suplementos

Si importante es conocer que no hay que darles a los niños suplementos porque sí, también lo es saber que es imprescindible tener cuidado con los mismos. En concreto, entre los aspectos que hay que tener en consideración están los siguientes:

  • Tomar más de lo aconsejable puede dar lugar a un serio problema de salud ya que pueden pasar a ser tóxicos. Este sería el caso, por ejemplo, de vitaminas como la A.
  • Bajo ningún concepto hay que creer que los suplementos vitamínicos vienen a sustituir a una comida. Lo exponemos porque hay quienes creen que sí es así.
  • Una sobredosis de algún elemento de los que nos ocupan, como sería el caso del hierro, puede llegar a provocar la muerte.

Otros datos de interés

Además de todo lo expuesto, hay otra serie de aspectos que merece la pena conocer a fondo acerca de los suplementos vitamínicos como son estos:

  • En los bebés que se alimentan de la leche materna o incluso mediante leche de fórmula no es necesario recurrir a los citados preparados.
  • El consumo de suplementos puede hacer que el niño se desentienda de la alimentación, claro, porque como esos le aportan los micronutrientes necesarios no necesita “comer bien”. Y eso es un grave error.
  • Hay que extremar la precaución con esos productos, en tanto en cuanto no deben dejarse al alcance de la mano de los menores.
  • Los citados suplementos si no se toman adecuadamente pueden traer consigo un desequilibrio de la flora intestinal.
  • Siempre que sea posible, hay que evitar tomar suplementos y apostar por una dieta sana, completa y equilibrada. Hay que enseñar a los niños a comer adecuadamente para que así su organismo cuente con todo lo necesario para crecer sano y fuerte: calcio, hierro, la vitamina C, la vitamina A y la vitamina D.
  • Como es habitual, los padres deben ser los encargados de dar ejemplo a sus hijos en cuanto a la alimentación. De esta manera, se evitarán, siempre que sea posible, la ingesta de esos preparados.

Lo último en Bebés

Últimas noticias