Mitos sobre los síntomas durante el primer trimestre del embarazo

Multitud de “leyendas urbanas” son las que existen sobre el embarazo. Así, por ejemplo, tenemos que subrayar que muchas rodean a los habituales síntomas que sufren las mujeres cuando están esperando un bebé.

Sin embargo, para que tanto las primerizas que se encuentran en estado como las féminas que ya han sido mamás y quieren repetir lleven a cabo unos periodos de gestación con la mayor información fiable posible, vamos a desmontar algunos de esos mitos. En concreto, a continuación, vamos a exponer qué creencias que se han establecido como verdaderas sobre el primer trimestre del embarazo son absolutamente falsas:

1-No satisfacer un antojo propicia que el bebé nazca con una mancha

¿Quién no ha oído alguna vez eso de que hay que cumplir todos los antojos que tenga la embarazada porque si no le pueden aparecer manchas al bebé con la forma del alimento que deseaba? Seguramente todos. Y es que desde hace décadas y décadas ha existido la idea de que los “caprichos” había que satisfacerlos sí o sí si no deseaba que el niño naciera con huellas en su piel. Así, por ejemplo, se habla de que hay pequeños que tienen en su cuerpo manchas rojas con forma de fresa porque sus mamás tuvieron ganas de comer esta fruta durante los primeros meses del embarazo y no pudieron hacerlo.

Pues bien, ante todo eso hay que dejar clara una cosa: es mentira. No hay ningún tipo de relación científica que demuestre que no satisfacer un antojo supone marcar al bebé. Este puede nacer con imperfecciones en su piel por distintos motivos, pero ninguno en conexión con los caprichos culinarios de su mamá.

Así que ya no es necesario hacer que el futuro papá tenga que recorrer media ciudad, en plena madrugada y bajo una lluvia infernal para encontrarle a su mujer embarazada un helado de chocolate, una hamburguesa o frutas que no están de temporada.

2-El hambre constante es porque tiene que comer por dos

Otro de los mitos más frecuentes sobre los síntomas que experimentan las gestantes durante los primeros meses es que constantemente tienen hambre porque deben comer por dos. Ante esto, que es una idea que nos han transmitido nuestras abuelas y madres, lo que hay que decir es que mentira.

Con lo que ingiere habitualmente la mujer es suficiente para que tanto esta como su bebé se encuentren en perfecto estado.

Muchas féminas aprovechaban esa creencia popular para “hincharse” a comer, para disfrutar de un sinfín de productos que les fascinaban y para dejar de lado las habituales dietas que seguían siempre para estar en forma. El resultado de esas acciones es que durante los nueve meses engordaban mucho más de lo recomendable y eso provocaba que aparecieran serias complicaciones para sí mismas y también para sus pequeños, tales como colesterol o hipertensión.

Por ese motivo, lo que se debe hacer siempre es llevar a cabo una alimentación sana, completa y equilibrada que les permita estar en buen estado de forma y que les lleve a no aumentar su peso en más de doce kilos.

3-La acidez es fruto de que el niño es muy peludo

De la misma manera, también está la creencia popular de que cuando la embarazada sufre numerosos problemas de acidez durante los primeros compases del periodo de gestación eso es debido a que el bebé que viene en camino tiene mucho pelo. Sin embargo, hay que decir que es una mentira, nada tiene que ver una cosa con la otra.

Los estudios llevados a cabo hasta el momento lo que han venido a demostrar es que esa citada molestia estomacal y digestiva si se produce es porque los cambios hormonales que se experimentan vienen a relajar los músculos del estómago y eso, a su vez, favorece que los ácidos suban con mucha más facilidad por lo que es el esófago provocando la acidez.

Otras mentiras sobre el primer trimestre del embarazo

Además de los ya expuestos, hay que determinar que existen más mitos sobre el primer trimestre del embarazo que son absolutamente falsos. Entre los más significativos se encuentran estos:

• No se puede practicar ningún tipo de deporte. Esta idea es mentira, es más, salvo que así lo indique el médico si se está llevando a cabo una gestación de riesgo, se recomienda que la futura mamá realice ejercicio porque esto le ayudará a estar en forma, a gozar de buena salud, a reducir síntomas como la hinchazón de piernas y a liberar el estrés.

• La gestante no puede tomar el sol. Esto también es falso. La embarazada puede tumbarse bajo el sol pero, por supuesto, de manera controlada y tomando las mayores precauciones posibles en pro de su salud. Es decir, debe hidratarse convenientemente, debe aplicarse el conveniente protector solar…