Los mejores propósitos como padres para 2016
Dejar de fumar, apuntarnos a un curso de inglés, comenzar a hacer ejercicio o incluso perder los kilos de más que sobran. Estos son los propósitos habituales que todos, o la gran mayoría, nos hacemos cuando comenzamos un nuevo año. Y, con toda probabilidad, serán los que nos volveremos a establecer cuando aterrice 2016.
No obstante, esos son a nivel personal e individual, pero si eres padre o madre deberás establecerte otros en relación a tus hijos. Y es que siempre hay que intentar mejorar en cualquier aspecto y más aún si del mismo depende el bienestar de tus pequeños.
Por eso, si consideras que puedes hacer algo más en ese sentido, establécete propósitos de enmienda como estos:
1-Dedicarle más tiempo a los niños
Las complicadas agendas laborales llevan a que muchos padres apenas cuenten con tiempo en el día a día para pasarlo con sus hijos, que deben “conformarse” con compartir el momento de la cena o el de leer un cuento antes de irse a dormir. Si eso te sucede, si consideras que no estás todo lo que te gustaría con tus pequeños, piensa en ponerle remedio. Es cierto que los compromisos laborales son ineludibles, pero no asumas más cargas de las que te corresponden porque eso supone perjudicar tu relación con los niños.
Piensa bien en establecerte prioridades y, por supuesto, aprovecha al máximo el tiempo que tienes libre para estar con tus hijos, ya sea viendo una película en casa o saliendo fuera a practicar cualquier actividad.
2-Tener más paciencia
Por muy tranquilo y relajado que seas, posiblemente tus hijos te hayan sacado en más de una ocasión de tus casillas. Y eso es algo que debes evitar, primero porque les transmites que “ganan” en ese tira y afloja contigo y segundo, porque les dejas patente que las cosas se solucionan con gritos y enfados.
Partiendo de esa situación, no dudes en establecerte como propósito para el 2016 ser mucho más paciente con los niños. Cuando veas que vas a perder los nervios, cuenta hasta 100, respira profundamente y piensa que tienes que educarles en el respeto y en el diálogo.
3-Escucharles más
La falta de tiempo para estar con los pequeños, posiblemente provoque que haya muchas cosas que desconozcas de sus gustos, de sus ilusiones, de sus sueños…Un craso error este, porque son tus hijos y debes saber lo máximo posible de ellos, para ayudarles, para animarles, para estar a su lado siempre que lo necesiten. Así que con la llegada del nuevo año, proponte cambiar esta situación. ¿Qué hacer? Básicamente dialogar más y, sobre todo, escucharles.
4-Ser siempre un ejemplo
Otro de los importantes propósitos que debes marcarte es el de actuar siempre correctamente ante tus hijos y es que debes ser un ejemplo. Te has convertido en su espejo y eso supone que, para que tengan valores y actúen acorde a los mismos, tú te comportes en todo momento de la manera más idónea.
Así, no debes usar la violencia jamás, porque harás que crean que con la misma se arregla todo; no debes emplear insultos hacia nadie, porque estarás provocando que los niños lo vean como el comportamiento normal; tienes que respetar a los demás, pues así los harás personas tolerantes; debes llevar a cabo una alimentación sana y variada, para que aprendan que hay que comer de todo y bien…
5-Implicarse más en la vida escolar
Ni que decir tiene que también es vital que te impliques al máximo en sus estudios. Por eso, si no lo haces, establécetelo como objetivo a conseguir en 2016. Ayudarles más en las tareas escolares, preguntarles acerca de sus dificultades a la hora de estudiar o estar más en contacto con sus tutores te servirán para que contribuyas a que saquen sus cursos adelante de la mejor manera posible.
6-Demostrarles más el cariño
Por supuesto, no te olvides tampoco de este otro propósito, especialmente si tu carácter te hace ser menos afectuoso o más “arisco”. Las personas adultas de tu entorno pueden entender que no seas una persona a la que le gusta mostrar tus sentimientos, pero no tus hijos.
Los pequeños necesitan saber constantemente que los quieres, requieren sentirse apoyados y están felices cuando saben que hay quienes los aman incondicionalmente. Por eso, no dudes en besarles, en abrazarles, en darles palabras de ánimo, en darles una caricia o incluso en decirles “te quiero”. Eso les subirá la autoestima, fortalecerá los lazos afectivos que hay entre vosotros y a ambas partes os hará sentir contentos.
No hay mejor regalo que les puedas dar a tus pequeños que tu amor y la manifestación del mismo. Así que pon de tu parte, mejora como padre o madre, ¿qué te cuesta ser cariñoso y hacerles felices?