8 consejos para evitar la retención de líquidos durante el embarazo
Desde el primer momento, la mujer que está embarazada tiene que hacer frente a una serie de cambios en su cuerpo que, en muchos casos, se traducen en inconvenientes que provocan en ella irritabilidad o molestias de algún tipo.
Así, por ejemplo, es habitual que sufra retención de líquidos, que se manifiesta a través de sensación de pesadez y de hinchazón en piernas o tobillos. Fundamentalmente en el tercer trimestre del periodo de gestación es cuando tiene lugar aquella, que es debida, sobre todo, a los cambios hormonales que padece.
Incómoda resulta esa situación, por lo que es recomendable seguir una serie de consejos que evitarán que aparezca o bien que llegue a desaparecer en la mayor medida posible:
- Es imprescindible llevar ropa cómoda y holgada que no presione el cuerpo y favorezca la retención de líquidos.
- Es interesante incluir en la alimentación productos que la disminuyan tales como la piña.
- De la misma manera, también es importante que en la dieta durante el embarazo la mujer coma artículos ricos en potasio, como sería el plátano, ya que ayudan a eliminar a orinar con más frecuencia y, por tanto, a evitar que aparezca la retención. Además de dicha fruta se recomienda ingerir calabacín, champiñones o espinacas.
- No menos importante es evitar estar mucho tiempo en determinadas posturas como de pie o sentada con las piernas cruzadas.
- Siempre que pueda, lo recomendable es que la futura mamá cuando descanse lo haga con las piernas en alto.
- Actividades físicas moderadas, como salir a caminar todos los días media hora, también favorecen la lucha contra la retención de líquidos.
- Por supuesto, es imprescindible tener bajo control la alimentación para no aumentar demasiado el peso. Ya que mientras más kilos tenga el cuerpo, más se propicia la retención de líquidos.
- Reducir al máximo la cantidad de sal que se echa a las comidas.