Baleares

Lanzan una campaña para endurecer los límites de velocidad de los barcos tras la tragedia de Cala Bona

GOB y Mallorca Blue publican un vídeo en las redes para preservar la seguridad de los bañistas y del litoral

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Después de la tragedia ocurrida la noche del pasado viernes en Cala Bona, en el municipio mallorquín de Son Servera, donde un yate con bandera alemana arrolló a un joven mallorquín de 21 años que estaba pescando, causándole la muerte en el acto, el grupo ecologista GOB y Mallorca Blue han lanzado una campaña para pedir que se endurezcan las limitaciones de velocidad de las embarcaciones en las zonas cercanas a la costa.

Estas organizaciones han publicado un vídeo en las redes sociales donde reclaman ampliar las restricciones de la limitación de velocidad de navegación hasta los 300 metros para toda la costa litoral tanto de playa como de rocas. Actualmente, la velocidad en el litoral está limitada en la ley estatal a tres nudos en la franja de 200 metros en las zonas de costa y de 50 metros en las zonas rocas.

El GOB y Mallorca Blue han advertido, sin embargo, que esta limitación no tiene en cuenta la realidad de Baleares, donde las zonas rocosas y acantilados también son muy frecuentadas por usuarios en embarcaciones no motorizadas y bañistas.

Así, y manteniendo la restricción actual de hasta tres nudos, en el resto de litoral hasta estos 300 metros solo se podría navegar hasta cinco nudos.

Estos grupos ecologistas esgrimen que esta distancia de 300 metros aumentará la seguridad de las personas que acceden a la costa sin una embarcación motorizada y reducirá la contaminación acústica que afecta tanto a vecinos como a especies que viven a la costa y a las especies marinas de hábitats menos profundos.

El vídeo de la campaña contiene imágenes en las que se ve a grandes embarcaciones y motos de agua navegando a gran velocidad en zonas de la costa, poniendo en peligro a bañistas y usuarios de kayacs, piraguas y tablas de pádel surf.

El Govern revisará el decreto que regula el chárter náutico

La presidenta balear Marga Prohens ha anunciado este martes que su Govern prevé revisar el Decreto 21/2017 por el que se regula la actividad de alquiler de embarcaciones y buques de recreo para aumentar la seguridad.

Lo ha hecho después de presidir la constitución de la Mesa Náutica de Baleares en la que se ha resaltado la importancia de la regulación y el control en este sector, mencionando la revisión del Decreto 21/2017 con el objetivo de simplificar la gestión administrativa y mejorar la eficiencia en la aplicación de la normativa.

Según ha explicado el director general de Puertos y Transporte Marítimo, Antoni Mercant, la normativa necesita una digitalización y modernización y, sobre todo, que la declaración responsable de las empresas «sea más intensiva» y «realmente responsable», aumentando los requisitos de seguridad, recoge la agencia Europa Press.

Actualmente, la Dirección General de Puertos cuenta con dos inspectores que se coordinan con agentes de la Guardia Civil, Aduanas, de Medio Ambiente y de la Dirección General de Pesca para poder realizar más inspecciones. No obstante, ha señalado que son pocos y que existe un proyecto para ampliar el número de embarcaciones y personal para garantizar que «todo el mundo cumpla la normativa».

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