Enésimo poblado de chabolas en Palma en plena temporada turística, ahora en un solar de calle Aragón
Enésimo poblado de chabolas en Palma en plena temporada turística, ahora en un solar abandonado de la calle Aragón, lo que deja cada vez más claro que el chabolismo sigue ocupando solares vacantes y los indigentes asentándose allá por donde pueden en cualquier rincón de la capital balear, sin que Ayuntamiento de Palma, ni Consell de Mallorca, hagan nada ante este degradante fenómeno social en expansión.
Desde el mismo centro, caso de la calle Eusebio Estada a cien metros de la concurrida Plaza de España, en Son Serra, Son Oliva, Sa Riera… o en este solar ubicado frente a la salida y entrada a la Vía de Cintura.
Este enésimo poblado de chabolas del barrio de Son Forteza ha ido montándose desde hace más de un año, justo detrás de una casa okupa en ruinas de la calle Prevere Rafael Barrera, que amenaza con su desplome.
Tras unas vallas publicitarias se encuentra este asentamiento donde subsisten más de una decena de indigentes, que entran y salen con sus bicicletas cargadas de toda clase de chatarra. Sin agua corriente, ni luz y en un estado de salubridad lamentable, sobreviven como pueden en un lateral de la calle de Aragón, perfectamente visible desde la acera, aunque no en toda su extensión.
El pequeño poblado de chabolas está construido como suele ser habitual con toda clase de materiales de desecho, puertas, ventanas, persianas, lonas raídas, palés y toda clase de materiales esparcidos a lo largo y ancho de este solar.
Formaciones de la oposición en el Ayuntamiento de Palma, caso de Vox, han presentado diferentes propuestas instando al gobierno municipal presidido por el alcalde socialista, José Hila, a actuar de forma urgente para atajar este peligroso y denigrante fenómeno, no sólo desde una vertiente de seguridad y policial, sino también habitacional y humana, promoviendo un plan de actuación centrado en la eliminación de estos poblados y la asistencia a sus moradores, en los casos que la requieran.
La respuesta del Consistorio, en este caso, del teniente de alcalde independentista de Bienestar Social, Antoni Noguera, siempre es idéntica: se trata de una competencia del Consell de Mallorca, en concreto, de la Unidad de Emergencia Social (UMES), si bien se trata de un servicio puntual de atención asistencial y distribución de alimentos, ropas y mantas.
Ninguno de los indigentes de este poblado ha pasado por la denominada Red de Inserción Social del Consell que cuenta con 465 plazas para sin techo y durante 2021 atendió a un total de 1.007 personas. Además de Ca l’Ardiaca, centro de primera acogida y sa Placeta, el Consell gestiona 170 plazas en Casa de Familia, 25 en el albergue de Manacor y otros temporales en Son Ribes (18), es Molinar (15) y Ruberts (12).